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La ineficiencia de Rómulo

¿De MORENA a «Muuurena»?

Sin Filtros; por Brenda Ramos

En la política, las suposiciones equivocadas son tan letales como la falta de estrategia. En MORENA Tamaulipas, el liderazgo estatal encabezado por Rómulo Pérez parece haber cometido ambos errores, y la evidencia ya apunta a una fractura que podría costarle al gobernador el control de su propio partido.

La situación quedó sellada desde el pasado VII Congreso Nacional Extraordinario de MORENA, celebrado el 22 de septiembre de 2024, donde se determinó que los actuales consejeros del partido permanecerán en sus cargos hasta 2027. Los estatutos son claros: los consejeros son pieza clave para la elección de liderazgos estatales, y su vigencia no está en discusión. Sin embargo, Rómulo Pérez parece haber asumido que su relevancia era transitoria y optó por la confrontación en lugar de la conciliación.

En Tamaulipas, hay 90 consejeros con voz y voto. Un tercio de ellos, aquellos que han sido ignorados, golpeados o simplemente tratados con indiferencia, se han convertido en el voto indeciso. Este grupo, que no es enemigo de nadie más que del maltrato político, será el factor decisivo en la elección del próximo presidente o presidenta del partido. Mientras tanto, al menos 28 consejeros con votos dobles ya se han inclinado por el grupo de José Ramón Gómez Leal. Este bloque, respaldado por figuras como Maki Ortiz y Carlos Peña Ortiz, tiene la fuerza suficiente para inclinar la balanza en la sesión extraordinaria si no los detienen a tiempo.

El próximo 30 de noviembre, en el Salón Gran Hotel Las Fuentes de Ciudad Victoria, los consejeros se reunirán para tomar una decisión que definirá el futuro del partido en el estado. La elección será el reflejo de las alianzas, fracturas y tensiones internas que Rómulo Pérez no ha sabido manejar. Según los estatutos, el proceso será supervisado por la Comisión Nacional de Elecciones, garantizando que la votación sea transparente. Pero la transparencia no arregla los errores estratégicos.

Rómulo ha apostado al desgaste, confiando en que el descontento se resolvería solo. Pero los documentos del Congreso Nacional son claros: los consejeros son el corazón del partido, y su papel no es opcional. Al contrario, su relevancia y permanencia hasta 2027 garantizan que su voz seguirá siendo determinante. Mientras tanto, Rómulo parece haber gastado más tiempo creando enemigos que aliados, abriendo el camino para que el grupo de José Ramón Gómez Leal consolide su estrategia hacia la gubernatura.

El riesgo de esta consolidación no debe tomarse a la ligera. José Ramón no es solo un actor político; es cuñado del exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca, y sus aliados más cercanos, como Maki Ortiz y Carlos Peña Ortiz, no han hecho ningún esfuerzo por ocultar sus vínculos con el cabecismo. Incluso la hija del exgobernador, la regidora Sofía García Gómez, se ha posicionado del lado de este grupo, y en Reynosa es evidente cómo ella y los otros regidores del PAN cabecista reciben un trato privilegiado por parte de los aliados de José Ramón. Estas señales apuntan a un regreso del cabecismo, no solo como un proyecto político, sino como una estructura de poder que MORENA y el gobernador Américo Villarreal han intentado erradicar.

No es coincidencia que el juez Faustino, conocido por otorgar amparos clave a Cabeza de Vaca, sea el mismo que recientemente favoreció a la COMAPA Reynosa, un caso envuelto en cuestionamientos y que refleja la mano de los intereses cabecistas. Este es el verdadero peligro: que el grupo de José Ramón utilice las estructuras de MORENA como una plataforma para revivir el legado que tanto daño hizo al estado y al partido.

Con solo nueve días para intentar revertir el rumbo, los líderes políticos de Rómulo tendrán que tomar decisiones drásticas. Sin embargo, los números no están de su lado. Ya en votaciones previas, como el tema de los representantes electorales, el grupo de Rómulo fue derrotado, y la tendencia no parece cambiar. El terreno se ha preparado para una victoria clara del bloque opositor, que no solo busca la presidencia estatal de MORENA, sino también posicionarse estratégicamente para 2027.

El 30 de noviembre será un día clave para MORENA Tamaulipas. Pero esta elección no solo definirá un liderazgo estatal; determinará si el cabecismo encuentra un nuevo refugio bajo las siglas de MORENA. Y si los responsables de esta decisión no actúan con responsabilidad, las consecuencias serán irreversibles. En política, no hay espacio para el maltrato ni para la soberbia. Rómulo lo está aprendiendo de la peor manera, pero permitir el retorno de lo que tanto costó erradicar sería un error aún mayor.

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