Pensión para mujeres: buena. Prohibición alimentaria: de risa y regidores flojos

Por: Vicente Hernández

“Más abominable aún que los imperialistas son los hombres de las oligarquías nacionales que se entregan vendiendo y a veces regalando por monedas o por sonrisas la felicidad de sus pueblos.”
«Evita Perón”

Es una buena noticia enterarnos que hasta el 20 de octubre se han registrado a 704 mil 947 mujeres para poder ser incluidas en el programa social “Pensión Mujeres Bienestar” digo, no soy muy aplaudidor que digamos de Morena, pero existen mujeres que son madres solteras, divorciadas, separadas y que trabajan mucho, reciben poco, y en la mesa para sus hijos, nietos o familiares enfermos debe de haber comida tres veces al día, por esta razón me complace saber que este programa que ha sido impulsado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, que forma parte de sus compromisos, y que este beneficiará a las mujeres adultas mayores de manera muy particular.

Mientras esto sucede en el gobierno federal, en Altamira los nuevos regidores todavía no agarran el paso, y en la mañanera de este lunes el alcalde Armando Martínez Manríquez se quejo que los regidores morenistas, son los que menos asisten a las mañaneras y a sus recorridos de trabajo, en cambio los que llegaron por la vía plurinominal, le acompañan como sombra en todos sus recorridos, y asisten tempranito a las mañaneras, y vaya que tiene razón el alcalde, porque hay cada regidor o regidora, que les da flojera dejar la camita tan temprano.

Da risa el anuncio que hiciera durante la mañanera, el flamante Secretario de Educación Publica (SEP) Mario Delgado Carrillo, en el sentido de que, a partir del 29 de marzo de 2025, será obligatoria la prohibición de la comida chatarra para las 258 mil 689 escuelas del país, en los tres niveles educativos: básico, media superior y superior, porque acaba de descubrir que 5.7 millones de estudiantes entre cinco y 11 años tienen problemas de obesidad o sobrepeso.

Y digo que da risa, porque tal medida es muy difícil de llevar a cabo, debido a que las mamás desde hace muchos años están acostumbradas a poner en la lonchera de sus hijos un sobre de papitas, un gansito y una bebida color naranja, que juran los fabricantes es “jugo de naranja” de muy poco valor nutricional, es la comida conocida como ‘chatarra y a la salida del plantel educativo los infantes corren con los vendedores afuera de las escuelas por sus rancheritos, gomitas, tamarindos con chile y una gran variedad de “golosinas” que sus madres gustosas les pagan a sus lombricientos hijos.

Ah, pero como buen morenista, Mario le endoso la culpa de este sobrepeso al pasado cuando externo: “Esto al periodo neoliberal no les preocupó; al contrario, se promovió” (¿de verdad Mario?) solo que el Secretario, excuso mencionar que también en el sexenio de su jefe López Obrador nada se hizo al respecto, ¿pues no que no son iguales? muy por el contrario, durante el periodo oscurantista, cangrejero y pejero lopezobradurismo, eliminaron las escuelas de tiempo completo, en donde les daban a los niños comida de verdad, y que decir de los desayunos escolares, y las cocinas comunitarias en las escuelas, donde las madres de familia se turnaban para prepararles almuerzos nutritivos a sus hijos, y bueno aquí termino mi texto, porque ya me dio hambre, y voy a la tienda a comprarme unos “Chetos” y unos “Nachos”, y para lo que resta del día una Coca Cola de 5 litros. – ¿Cómo la ven?