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Mi amigo Paco Rojas

Sin Filtros; por Brenda Ramos

Si bien, mi carrera en el periodismo inició en secundaria, cuando mi papá Miguel Ramos (QEPD) necesitaba un “chalán” para repartir en sus conocidos carritos viejos la revista Multicosas, cuando quise dedicarme por completo a esta bonita profesión, uno de los periodistas que me “adoptaron” y apoyaron fue Francisco Paco Rojas.

Conocí a Paco en una rueda de prensa, cuando Alejandro Rojas se presentó en Reynosa en un conocido restaurante al lado de presidencia municipal. Pocas semanas antes, habría obtenido mi primer trabajo separada de mi papá, con mi mentor Mauricio Fernández Díaz, quien me presentó a quien es hoy uno de mis mejores amigos Oscar Díaz Salazar.

Debido a la línea editorial aguerrida de don Mauricio, encarecidamente me “encargó” con Oscar Díaz quien de inmediato se volvió mi consejero y protector. Recuerdo que Oscar, recién había tenido una mala experiencia con algún pupilo que no supo aprovechar la gran oportunidad que le brindó la vida pues se le abrieron las puertas con los grandes del periodismo y las desaprovechó con conductas irrazonables.

Debido a eso, agradecí enormemente que volviera a creer que no todos los pupilos pagamos de la misma manera y agradezco mucho que no solo me haya presentado a Paco Rojas ese día, sino que al darme su voto de confianza, Paco quien como ustedes saben, era muy selectivo (así se lo enseño la vida) con su círculo, no solo me dejó entrar a este, sino que como les mencioné al principio me “adoptó” junto con otros amigos, ayudándome y guiándome en el camino del periodismo.

Mi línea en sentido común continuaba, pero como don Mauricio no vivía en la frontera, era más común que Isaías Álvarez (mi esposo, compañero y protector en esta carrera) y yo, acudiéramos a buenos amigos como a Paco, por consejos que muchas veces se convirtieron en regaños, que gracias a que “aguantamos vara”, siguió invitándonos a participar en su programa y ayudándonos con sus puntos de vista para no meternos en problemas en este feroz mundo del periodismo crítico.

Tuvimos muchas anécdotas, nos encontramos en muchos eventos. En la primera mañanera en la que coincidimos, expuso al presidente López Obrador el problema del Lirio Acuático en el canal Anzalduas, que se generó por la materia fecal que se descarga desde el dren de las mujeres sin pena ni vergüenza de COMAPA Reynosa,a este canal a pesar de que Río Bravo y Valle Hermoso, utilizan esa agua para consumo humano.

En la segunda mañanera, expuso valientemente la violencia en el área de Palo Blanco en Reynosa y Río Bravo. Me dejó con la boca abierta, pues sin temor, defendió la verdad, a pesar de lo peligroso del tema.

Así era Paco, un periodista bravisimo. Cuando atacaron las instalaciones de FOCUS Radio, defendió valientemente su casa editorial, junto con Hugo Reyna, otro buen amigo que entonces también laboraba ahí.

Paco contagiaba el valor y las ganas de hacer un periodismo serio y de investigación, convirtiéndose en incómodo para los políticos que no realizan bien su trabajo.

Me encantaba participar con él en su programa, siempre estuve agradecida porque me invitaba a su espacio en INFOCUS y me publicaba la información en Reynosa News.

Mis programas favoritos eran cuando invitaba a participar al periodista Guadalupe Ernesto González(el amigo más sincero que me heredó mi papá ) y juntos señalaban la inmundicia y promiscuidad social en la que vive Reynosa

Paco me enseñó que a los pendejos se les ignora y que al poder, no se le adora. Que el periodismo debe ser serio, de investigación, que a la autoridad no se le falta al respeto, pero se le exhibe con pruebas aunque eso ocasione incomodidad hasta entre los propios periodistas que se ponen correa y se le deben a un amo.

Es un texto fuerte, como fuerte e inquebrantable fue Paco, tan fuerte que no lo olvidaremos, tan fuerte que su influencia seguirá en nuestras plumas y en nuestra forma de hacer periodismo.

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