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¿Grupo Hercules 2.0?

Fuentes fidedignas. Por: Isaias Alvarez

Hace días circuló un video del candidato a la alcaldía de Matamoros por Movimiento Ciudadano, Roberto Lee, en donde graba el momento en el que pasa con su equipo de trabajo frente a una caravana de 6 camionetas blindadas. Desconocemos de quien creía que era ese convoy, pues se vio un tanto sorprendido al darse cuenta de que eran de la candidata del PRIAN, Leticia Salazar.

Las imágenes son claras, una candidata fuertemente escoltada, por casi una decena de vehículos blindados, con vidrios polarizados, placas oscurecidas para dificultar la identificación del vehículo y llenos, claro, de hombres armados. Los habitantes de Matamoros no se alarmarían si la señora Salazar no tuviera algún antecedente que la relacione con temas de seguridad personal, violencia desmedida y armas, pero no es así.

Al ver las imágenes del video, no podemos pensar en otra cosa más que el grupo de escoltas de la exalcaldesa, llamado ‘Hércules’; mismo que en ningún momento se caracterizaron por ser un beneficio para Matamoros, al contrario, estuvieron vinculados a múltiples actos criminales, incluidos el asesinato de 3 jóvenes hace diez años.

La candidatura de por si empezó mal, con su suplente, quien cuenta con una reputación dudosa y un pasado oscuro que están mermando la aprobación de la ciudadanía. Ya no es como hace diez años, que ganaron con sus trucos y cuando el PRIAN tenía el poder para hacer y deshacer en las elecciones; las cosas han cambiado y Morena se encuentra muy fortalecido en el Estado, y más en Matamoros, quienes muchos afirman que es el bastión morenista a nivel estatal.

El actuar y el estilo que en el presente dan a mostrar los candidatos es un reflejo de su futuro como políticos. Lety con su convoy de camionetas y gente armada, demuestra que su manera de trabajar, será la misma que hace diez años. Se podrá escudar en el argumento de que ella ha hecho declaraciones acerca del proceder de células criminales en la ciudad y por eso trae su caravana de escoltas; lo cierto es que, ella nada tiene que estar hablando de la inseguridad, pues esta es atendida por el Estado y Federación. Lo único que puede hacer un alcalde es pedir el apoyo y hacer las peticiones pertinentes a los poderes antes mencionados y esperar a que las autoridades competentes tomen acciones.

Su bandera contra la inseguridad es una propuesta de humo que no podría atender, a menos que quiera revivir a su grupo de terror y esperar lo peor en un Matamoros relativamente bajo control.

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