Agencia Reforma
Especialistas en educación aplaudieron ayer que México haya rectificado sobre la aplicación de la prueba PISA, pero demandaron un plan de política efectiva para atender los resultados que arroje la evaluación en 2025.
Luego de más de 10 días de silencio de las autoridades educativas, finalmente, el Presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que México sí participará.
No obstante, los especialistas alertaron que el Mandatario federal parecía que no estaba del todo informado del tema.
Eduardo Andere, investigador visitante del Colegio de Boston, experto en política educativa, opinó que ayer López Obrador no mostró total conocimiento sobre lo ocurrido con esta evaluación, pero le pareció importante la frase «Todo lo que tenga que ver con la educación se apoya».
Sin embargo, el especialista advirtió sobre la importancia de que los resultados de esta prueba estandarizada sean tomados en cuenta en el diseño de políticas públicas en beneficio de los estudiantes, pues recordó que a esta Administración le tocó recibir los de PISA 2022.
También criticó la falta de personal experto que asesore al Gobierno en materia educativa y de evaluación.
Marco Fernández, especialista del Tec de Monterrey y de México Evalúa, afirmó que la respuesta del Presidente muestra los vacíos en la experiencia de su gabinete en materia educativa.
«La respuesta (del Presidente) es esperanzadora, pero con cautela, porque por un lado denota que pues la Secretaría de Educación Pública no lo mantiene informado y mucho menos Mejoredu», dijo.
Fernández lanzó un llamado para que los resultados de 2025, que toquen a la siguiente Presidenta o Presidente sean para mejorar el diseño de la política educativa.
