Altamira en las ocurrentes promesas del cándido candidato del PRD David Valenzuela
Por: Vicente Hernández
“Los perdedores hacen promesas que a menudo rompen. Los ganadores asumen compromisos que siempre cumplen.”
«Denis Waitley»
Cuando faltan solo un mes y días para el dos de junio, los candidatos arrecian sus campañas con promesas electorales, que si llegan a ganar no podrán, o no querrán cumplir, siguiendo la tradición de “si te vi, ni me acuerdo” tal es el caso del candidato del PRD David Valenzuela Barrios, quien al igual que la candidata a la presidencia de la republica Claudia Sheinbaum Pardo, se han convertido en cajas de resonancia de las ocurrencias del inquilino del palacio nacional, que no digo su nombre pero se apellida López Obrador, y un ejemplo nos lo da, cuando en su empeño por querer impulsar su imagen, y acarrearse votos rumbo a la presidencia, se le hace fácil copiar programas o proyectos, que no han podido ser bien aterrizados por quien los prometió o proyecto.
Tal es el caso de ofrecer que en Altamira, se contara con la primer “mega farmacia municipal” en todo México, con todos los medicamentos del mundo mundial (¿dónde he escuchado esto antes?) esta tan extraordinaria noticia, que puso a temblar a los pulpos farmacéuticos, como Similares, Del Ahorro, Guadalajara y otras del estado, y quizás de todo México, la dio a conocer mediante una rueda de prensa, en la que argumento que en Altamira existen mas de 70 mil altamirenses que no tienen acceso a un servicio medico gratuito como el seguro popular, (omitió decir que la mayoría los desapareció el gobierno morenista junto a los miles de millones de sus fideicomisos) mega farmacia donde cualquier ciudadano solo con presentar su credencial de elector, podrá obtener gratuitamente todos los medicamentos básicos y genéricos que requiera, de acuerdo al cuadro básico con el cual se regirá la mencionada farmacia ¿de verdad?
Pero si a estas alturas del partido, usted tiene el Jesús en la boca, ya sea para bendecir o para reflexionar sobre esta gran ocurrencia del candidato del sol azteca se preguntará; ¿y de donde pensara sacar el dinero para tan maravillosa mega farmacia que regalara medicamentos? Agárrese, porque el cándido candidato David Valenzuela se le ocurrió (no copio) otro gran programa; el llamado “Mamá soltera No esta sola” chulada de título, (con retumbe de batería y fanfarrias a cargo de la niña Mamalda) que de acuerdo a lo que explico el candidato, consiste en apoyar económicamente con siete mil pesos bimestrales a las madres solteras, como ayuda encaminada a la crianza de sus hijos, señalando que existe una falta de atención a las mujeres en esta situación, debido a recortes en apoyos a instancias infantiles, la anulación de las escuelas de tiempo completo, y el retiro de medicamentos para el tratamiento del cáncer de mama, (otra vez omitió decir que el gobierno de Morena quito estos apoyos) pero imagine usted estimado lector, cuantas madres solteras tendrá Altamira, y si solo son mil las aceptadas, entonces estaríamos hablando de siete millones de pesos cada dos meses, o sea 42 millones anuales por tres años, ¿y si se reelige? Creo que, de estos dos programas, lo único que se le olvido decir, fue que, si gana las elecciones al final de su trienio, Altamira estará en materia de salud a la altura del de Dinamarca, o tal vez del mundo.
Estas onaniciones mentales, pero validas como estrategias de campaña, tal vez fueron diseñadas cuidadosamente por la brillante mente de David, o quizás le fueron plantadas por su soplanucas oficial, y padrino político, el Cacique Juvenal Hernández Llanos, que, desesperado por volver al poder vía PRD, le aconsejo a su candidato amarillo que prometa el cielo y las estrellas para ganar votos, porque al final los únicos estrellados van a ser los ingenuos que creyeron en sus promesas.
Antes de terminar este texto, debo aclarar que no tengo algo en contra del joven David (soy amigo de la doctora y regidora Leticia Barrios) y hasta me da ternura su ingenuidad política, y mas cuando hace revelaciones acerca de su vida personal, en las que confiesa su (selecta) predilección por los maricos, la carne asada, su pasión por el deporte, y su entusiasmo por practicar el kickboxing, donde ostenta el cinturón azul, y el practicar futbol, complementando sus rutinas deportivas con visitas frecuentes al gimnasio, lo cual habla de que lleva una vida saludable.
Es más, me da gusto que su padre en difunto Armando Valenzuela Arroyo le haya heredado la dirigencia estatal del PRD, al que tanto trabajo le costo llegar, y tanto dinero le costo al Cacique Juvenal Hernández, pero que David ha sabido conducir con honestidad, y le ha proporcionado la oportunidad de ser electo candidato a la presidencia por su partido, y obtener por consenso la primera regiduría en la modalidad de reelección para su mamá la doctora Lety Barrios. -Órale