Maky y Makito ¡NO!
Sin Filtros; por Brenda Ramos
La historia de cómo Augusto Pinochet fue desafiado y eventualmente derrotado mediante la campaña del «No» en Chile marcó el fin de una de las dictaduras militares más duraderas y brutales de la región, y cuando lo mismo está por suceder en Reynosa, que al fin los ciudadanos podrían tener un nuevo comienzo al darse a conocer que Carlos Peña Ortiz no puede ser reelecto por tener suspendidos sus derechos políticos, aparece su madre Maki Ortiz para reclamar la candidatura a la presidencia municipal Y Mario Llergo a defender lo indefendible.
Augusto Pinochet llegó al poder en Chile mediante un golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973, derrocando al gobierno democráticamente elegido de Salvador Allende. Su régimen se caracterizó por la represión política, la tortura y la desaparición de opositores, así como por implementar políticas económicas de corte neoliberal, de una manera casi idéntica por el largo tiempo frente al poder y un mal gobierno, Maki Ortíz llegó al poder en 2016 para estar dos periodos en la presidencia municipal y luego heredó a su hijo el cargo, aunque para esto tuvieran que saltar del partido Acción Nacional a MORENA
Durante la década de 1980, la presión interna y externa sobre el régimen de Pinochet comenzó a intensificarse. La crisis económica de 1982, que provocó una profunda recesión y desempleo en Chile, junto con las crecientes denuncias de violaciones a los derechos humanos, empezaron a mermar el apoyo interno y externo al régimen. En Reynosa, luego que el vocal del Instituto Nacional Electoral (INE) en el estado Iván Ruiz Castellot confirmara que Carlos Peña no puede ser candidato y el alcalde le respondiera con mentadas de madre que Ruiz Castellot estaba equivocado, fue la muestra de que políticamente el grupo de los Peña Ortiz había sufrido un golpe mortal al intentar seguir con su dictadura, en la ciudad que tienen destruida, hundida en la violencia, carente de servicios básicos y sedienta de agua para el consumo humano.
En 1980, Pinochet había impulsado una nueva Constitución que, entre otras cosas, establecía la realización de un plebiscito en octubre de 1988 para preguntar a los ciudadanos si querían que Pinochet continuara en el poder por otros ocho años, pero cuando este se llevó a cabo, la oposición ganó con la campaña del “No”, obligando a Pinochet a convocar elecciones al año siguiente.
Regresando a Reynosa, Maki Ortiz, la dictadora que sigue el ejemplo de Pinochet, se encuentra desesperada, pues su hijo no tiene oportunidad para la reelección por lo que ya se menciona que la mujer esta puesta para contender en lugar de su hijo con tal de seguir en el poder, aunque para esto tenga que renunciar a su propia candidatura a senadora por el Partido Verde Ecologista.
A la “dictadora” la respaldaría el CEN de Morena, es decir Mario Delgado quien supuestamente no está dispuesto a regresar los 250 millones que se dice Maki habría pagado por la candidatura de su hijo, esto lo dejó muy claro Mario Llergo el mandadero de Delgado quien luego de finalizar la transacción en Tamaulipas y levantarle la mano a Carlos, días después salió huyendo cobardemente del estado.
Pero los planes de Maki pondrían al partido en un problema que ya no podrían resolver, ya que el tiempo para que el IETAM apruebe la candidatura de MORENA en Reynosa es el 15 de abril, y de acuerdo con el artículo 241 de la ley general de instituciones y procedimientos electorales Maky está amarrada para dejar su candidatura por un capricho para buscar la alcaldía de Reynosa.
Peor aún, la oposición panista tendría todas las de ganar ante los tribunales en una impugnación por actos anticipados de campaña, ya que lleva más de 30 días haciendo campaña en su condición de candidata a senadora y Reynosa quedaría en unas manos iguales de sucias que los Peña Ortiz, las del cabecista René Cantú el Cachorro.
Es por eso que urge que MORENA Tamaulipas actúe antes de que otro indeseable como Mario Llergo, intente dar madruguete al imponer a la señora, que no cumple con los requisitos de ser persona honorable, respetuosa de la ley, o sin señalamientos de corrupción.
Los prospectos son conocidos: Armando Zertuche Zuani, Humberto Prieto Herrera, Luis Miguel Iglesias y Marcelo Olán Mendoza. Marco Gallegos Galván, queda fuera de la lista al haber regresado al congreso del estado y debido a que el género en la ciudad es masculino, Magaly Deandar también se descarta.
Las posibilidades que tiene cada uno de estos políticos la discutiremos a la brevedad, pero lo que en este momento apremia es que para que la dictadura termine en Reynosa, a Maki y Makito hay que decirles ¡NO!.