Por: Oscar Aldrete
La ambición enfermiza por el poder del clan llamado «Makiato», Maky Ortiz y su hijo Carlos Peña, están llevando a Reynosa por caminos que conducen al abismo, tolerados y protegidos ($) por Mario Delgado, personaje impresentable de la política nacional. ¡En 250 millones de pesos está apoyado el siniestro acuerdo entre estos dos especímenes de la fauna política!
Con violaciones constantes a la ley (Constitución Federal y leyes secundarias electorales), y pasándole temerariamente por encima al jefe político del partido Morena, Américo Villarreal Anaya, pretenden sostener la frágil, ilegal y repudiada candidatura del miembro del clan. Algo está muy claro: si no se cae hoy, se caerá en el transcurso de la campaña; su inelegibilidad es más que evidente. La oposición demanda que se quede, al ver su vulnerabilidad legal y política.
Mario Delgado será el responsable directo de la derrota electoral de Morena en Reynosa, Tamaulipas. Más aún, de que en plena campaña los dejen sin candidato, abriendo el camino a la oposición partidaria para obtener la victoria electoral.
En un auténtico lodazal han convertido a mi querida ciudad de Reynosa, Tamaulipas. Lo peor de la condición humana se está viviendo por la necedad ($) de imponer a Carlos Peña para cumplir el compromiso millonario (dinero de los reynosenses) signado entre Mario «El Manos Rápidas» Delgado y «La Insaciable» Maky Ortiz…
