Fuentes fidedignas. Por: Isaias Alvarez
El pasado sábado 11 de noviembre, se llevó a cabo en Monterey el festejo de los 30 años de fundación de la casa de bolsa ‘Value’, propiedad del empresario Carlos Bremer, conocido por su participación en el programa televisivo ‘Shark Tank’. A este evento asistieron celebridades de la farándula, como Michelle Salas, Arturo Carmona; deportistas como ‘El canelo’ Alvarez; políticos como Patricia Armendariz y un sinfín de celebridades y amigos del empresario. Todo muy bonito y hasta cantó Luis Miguel; lo que nos sorprendió fue la presencia de dos personitas de Tamaulipas en este evento privado: el rector de la UAT, Guillermo Mendoza y su esposa Imelda Sustaita.
Este par muy cínicamente compartieron fotos de su asistencia al evento, subiendo a sus historias de Facebook las evidencias de que ahí andaban; en esta red social se pudo visualizar que se tomaron fotos con El Canelo y hasta con la esposa del Gobernador con licencia de Nuevo León, Mariana Rodriguez. Asimismo, la señora Imelda publicó una imagen en un área para tomarse fotos, con el logo ‘Value’, al parecer para reafirmar que ellos andan solo en eventos exclusivos, que se vea el calibre, la clase.
No tiene nada de malo pertenecer a un grupo social y asistir a este tipo de eventos, muchos ya quisieran andar ahí; lo que sí es cuestionable es el historial del rector, sus nexos con gobernantes del pasado, la pésima gestión al frente de la máxima casa de estudios del estado; vaya, hasta su esposa ha salido embarrada en temas con la prensa, pues hace días circuló que acosó a una reportera mientras esta entrevistaba al rector.
De igual manera, tiene escasos días que salió a la luz que el Tesorero de la universidad, le vendió a su esposa con el consentimiento de varios funcionarios más, una camioneta valuada en más de 700 mil pesos, por la módica cantidad de 12 mil pesitos; ni los ‘yonkeados’ valen eso. Todo esto fue expuesto en el Congreso del Estado por la diputada Magaly Deandar, mostrando pruebas y exigiendo la separación inmediata del cargo a Franklin Huerta, cosa que a la fecha no ha sucedido.
Los recursos de la universidad parece que son para ciertos funcionarios incluidos el rector, pues la infraestructura de los planteles a lo largo del estado carecen de muchas cosas para su eficiente funcionamiento. Asimismo, la relación entre el rector y Francisco García Cabeza de Vaca y los tratos que llegaron a hacer en su momento parece que siguen vigentes y dando frutos, pues para darse esos lujitos, tuvieron que estar muy buenas las tajadas y las tranzas.
Esto es solo la punta del iceberg en un posible desfalco y red de corrupción en esta casa de estudios, cosa que no es nada raro, que desconozcamos o nos sorprenda. Lo triste es que aun con las pruebas en la mano y los elementos para proceder, parece que las autoridades no les interesa atender el caso, parece que a la fiscalía nada más les gustan los casos con rateros de casa habitación y violencia intrafamiliar.