Jeremy Goodale, un adolescente de Iowa, fue condenado a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional en 25 años por su participación en el asesinato de Nohema Graber, una profesora de español originaria de Xalapa, México. Goodale y un amigo se declararon culpables de homicidio en primer grado por la muerte de la maestra de 66 años.
El homicidio ocurrió en 2021 cuando Goodale y su amigo utilizaron un bate para atacar a la maestra mientras realizaba su caminata diaria en un parque de Fairfield, Iowa. Antes de la sentencia, Goodale expresó disculpas a la familia de la profesora y a la comunidad, reconociendo la irreparabilidad de sus acciones.
El juez Shawn Showers dictaminó la sentencia, destacando que Goodale, a pesar de mostrar remordimiento, era consciente de las consecuencias de sus acciones. La decisión coincide con la solicitud de los fiscales y refleja la gravedad del crimen.