Por Oscar Díaz Salazar
Señala un dicho popular que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.
Tal parece que eso no lo han escuchado los dirigentes del partido Movimiento Ciudadano en Tamaulipas, en especial el presidente, Juan Carlos Zertuche, que acaba de validar el posible regreso de dos ovejas descarriadas a su rebaño, dos individuos a los que dio el trato de hijos pródigos, festejando su probable retorno a las filas de MC, luego de que se aliaron con los panistas en los procesos electorales pasados, cuando ostentaban representaciones y cargos de elección popular, que consiguieron con las siglas y colores, -naranja, naranja- de MC.
Los ex diputados Mario Ramos y Paty Pimentel, ambos de Ciudad Victoria, y ambos asimilados al panismo cabecismo, son esperados con las puertas abiertas y con esa sonrisa que distingue al dirigente emecista, si así lo quisieran los ex legisladores maromeros, de acuerdo a las declaraciones del líder estatal de MC, recogidas por una periodista de la capital.
Con todo y que sean «sonsacadas» las declaraciones del presidente de MC en el Estado, también son, por lo menos, desafortunadas, porque envían un mal mensaje a quienes ven una esperanza de cambio y una propuesta seria en el Movimiento Ciudadano de esta época, en la que se supone han quedado superados y rebasados los liderazgos vendidos, «arreglados», simulados, de esos profesionales de la derrota que solo están ahí para lucrar con las siglas y para acordar con el gobierno, y si usted está pensando en Gustavo Cárdenas, le diré que es el personaje que tuve en mente al escribir este párrafo.
Revivir muertos políticos en Ciudad Victoria, me parece que es una maniobra muy rústica, muy chafa, que tiene el propósito de ponerle piedritas en el camino al abogado Luis Torre Aliyan, en su propósito de ser el candidato y el presidente municipal de la capital.
La candidatura de MC a la presidencia de Victoria, se está poniendo interesante, y se pondrá muy cara, porque las circunstancias se están acomodando para que Movimiento Ciudadano, con un buen candidato, se meta a una pelea de tercios o cuartos, muy pareja, con morena y satélites muy mermada por el mal gobierno de Gattas y por tantos compromisos no cumplidos, con el PAN que aun respira y conserva espacios de poder y con él PRI que aún tiene una buena base de militantes que en algún tiempo se vieron favorecidos por esas siglas.
Lo mejor que pueden hacer los de MC, si pretenden que el partido crezca y se consolide, es impulsar los liderazgos emergentes, como el de Luis Torre, y quitarse lastres y piojos, como los que representa Gustavo Cárdenas y la runfla que lo acompaña.
