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Lalo Gattas y el espejismo de las redes sociales.

Sentido Común

Mauricio Fernández Díaz


Ciudad Victoria.- Desde que las redes sociales le permiten a cualquier hijo de vecino crear una página personal para ser visto como una celebridad, todo mundo se siente famoso y arropado por las masas.

Y aparentemente lo logran; mucha gente los “sigue” y les da “me gusta” a sus publicaciones. Pero olvidan que es el mundo virtual, no el real.

Engañados por este espejismo, muchos políticos recargan sus redes de publicaciones con la finalidad de impulsar sus carreras a cargos de elección más altos. Ingenuos.

Las redes sociales son un auxilio para mejorar la difusión de mensajes, pero son incapaces de construir una trayectoria, un perfil o un compromiso con la gente. Eso lo da la calle, caminar por las colonias, escuchar a los vecinos y hablarles cara a cara, no de pantalla a pantalla.

Lalo Gattás Báez inició esa trayectoria pública desde 1999, aunque las actividades políticas las había iniciado muchos años antes. El año en mención se desempeñó como regidor en la capital del estado.

Como victorense, sabe cómo piensan, hablan y sienten los ciudadanos de esta capital; es uno de ellos y quiere lo mismo que todos: ver resurgir a su municipio. Gattás está mejor informado que nadie de lo que pasa y lo que necesita Ciudad Victoria.

Por eso corrió el riesgo de competir como candidato a diputado local por el distrito XV, en el 2016, cuando Egidio Torre ya había negociado entregar al estado a los panistas a cambio de impunidad. Ataques, campañas negras, inequidad, todos los males que sufre un político de oposición ya los conocía Lalo desde entonces.

Desde ese año se unió al Movimiento de Regeneración Nacional y respaldó la lucha del Presidente López Obrador por una transformación de la vida pública, en este caso afincada en el capital de Tamaulipas.

En 2021, Lalo Gattás se registró como candidato a la alcaldía de Ciudad Victoria por Morena; volvió a visitar barrios, ejidos, mercados y a hablar con la gente de manera directa, como ha hecho desde 1999. Esta fue la parte amable de la campaña.

Sin imaginarlo, Cabeza de Vaca le echó encima el aparato del estado para descarrilarlo, abatirlo y hasta arrestarlo. En casos ocurridos en otros lugares del país, parecidos a este, los candidatos de oposición prefieren renunciar, pensando que su vida es primero; hay que respetarlos. Gattás siguió adelante en el proceso a pesar del peligro que corría. Esta fue la parte áspera de la campaña.

Los victorenses se dieron cuenta de las maquinaciones de los panistas, y como ya consideraban a Lalo como uno de los suyos, le dieron el triunfo.

Desde que asumió la alcaldía, Lalo Gattás ha tenido que reordenar absolutamente toda la administración pública municipal. Nada funcionaba en 2018 y menos en 2021.

Está en marcha un nuevo parque de camiones recolectores, equipos de limpieza y materiales para renovar, por no decir crear, un moderno sistema de Servicios Púbicos.

Se han rehabilitado más de 4,200 kilómetros de calles con asfalto e iniciado la restauración de caminos ejidales. Atención: el 90 por ciento de estas vías no se había asfalto desde 2019.

No son discursos; son hechos verificables por cualquiera que se interese.

También, esté en marcha la llegada de proyectos de inversión privada por un total de 800 millones de pesos. Entre las firmas que han confirmado su llegada a Ciudad Victoria están MG Motors, Chirey, Mitsubishi, Farmacias del Ahorro y Bodega Aurrera. Se crearán cientos de empleos directos e indirectos.

No es se trata de un milagro sino del deseo sincero de un victorense que conoce su tierra natal, sus fortalezas y necesidades, y la impulsa a salir adelante. Más de 24 años de andar por sus calles le da ese conocimiento con la gente.

En contraste, el diputado local José Braña Mojica quiere pedirle a los victorenses que lo hagan su candidato a la alcaldía en 2024. Pepe Braña es sobrino lejanísimo de López Obrador: esa es su salvación y también su perdición, ya que sin eso no queda nada. Pepe está completamente vacío y anda ahora interesado en la presidencia municipal por mero oportunismo. Sin ideas, sin proyecto y sin contacto con la gente, quiere que lo impongan desde la Ciudad de México como alcalde de la capital.

Es de los políticos que graban futilidades para llamar la atención de las personas y cosechar “me gustan” y crear una imagen ahí. Y ya la tiene, pero insulsa. Véalo usted mismo.

Yuriria Iturbe también aparece en los pronósticos, pero le falta recorrer territorio y tratar más a la gente. Ya compitió como candidata de Morena a la alcaldía en 2016 y perdió con Óscar Almaraz.

Solo Lalo Gattás Báez haría cómodo el triunfo de Morena en Ciudad Victoria por los hechos aquí referidos.

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