Cae jefe panista de CDMX por transa inmobiliaria
Christian Von Roehrich, exdelegado acusado de corrupción, fue retenido en Reynosa; lo deportaron tras intentar ingresar a EU
Ciudad de México.- Acusado de encabezar una red de corrupción inmobiliaria en la Alcaldía Benito Juárez (2015-2018), el exdelegado panista, Christian Von Roehrich, fue detenido ayer en McAllen, Texas.
Con el cabello y la barba crecida, el también exdiputado local fue deportado por la Garita Reynosa Hidalgo, tras haber intentado ingresar de manera ilegal a EU.
Previamente, Von Roehrich se resguardó en Morelos, Guanajuato, Querétaro y Tamaulipas, hasta ser aprehendido por agentes de Aduanas y Protección Fronteriza.
«Encabezó una red de corrupción conformada principalmente por funcionarios de la Alcaldía señalada, a quienes se les atribuye el otorgamiento de permisos ilegales de construcción, desalojos violentos y extorsiones a empresarios a través de la solicitud de sobornos en efectivo y/o departamentos», informó ayer Ulises Lara, vocero de la Fiscalía de Justicia capitalina.
La Fiscalía había pedido a Interpol México y al Instituto Nacional de Migración emitir una Ficha Roja y alerta migratoria.
Anoche se esperaba que el panista fuera trasladado a la Ciudad de México, custodiado por policías de investigación de la Fiscalía capitalina y se espera que hoy sea ingresado al Reclusorio Norte.
En la misma red de corrupción, ayer se dio a conocer la detención de Roberto «N», señalado de construir un edificio que rebasa los niveles y densidad permitidos en la Colonia Acacias.
CITY TOWERS
El complejo inmobiliario City Towers, en Santa Cruz Atoyac, es uno de los casos por el que es investigado el exdelegado Christian Von Roehrich.
De acuerdo con la declaración de un socio mayoritario de esa firma inmobiliaria, el panista le pidió reconstruir edificios dañados por el sismo del 19 de septiembre de 2017 a cambio de obtener permisos de construcción del inmueble.
Algunos de los edificios afectados que el exdelegado le pidió atender fueron Galicia 245, en la Colonia Álamos, y el de Enrique Rébsamen 249, en la Colonia Narvarte.
El exdelegado buscaba que los trabajos hechos por la empresa privada posteriormente fueran pagados a la administración panista con apoyos económicos que ofreció por esas tareas el Gobierno de la Ciudad de México.