Por Brenda Ramos
El 11 de febrero de 2023, un misterioso objeto volador no identificado fue detectado en el cielo de Yukón, en Canadá, y fue derribado por un avión de combate estadounidense. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, confirmó el derribamiento y dijo que él mismo dio las órdenes para hacerlo. Este hecho ocurre un día después de que aviones de Estados Unidos hicieran algo similar sobre Alaska.
El Comando Norteamericano de Defensa Aeroespacial (NORAD) indicó que había detectado un objeto que volaba a una altura muy elevada sobre Canadá, pero no proporcionaron más información sobre su naturaleza o propósito. Las operaciones de búsqueda y recuperación del objeto derribado en Alaska se encuentran obstaculizadas por el clima y la falta de luz solar, según un comunicado del comando norte estadounidense.
Este hecho ocurre una semana después de que fuerzas estadounidenses derribaran un supuesto globo de espionaje chino, lo que causó un nuevo incidente diplomático entre Washington y Pekín. La tensión entre ambos países se ha venido acentuando por motivos económicos y políticos desde hace años. China aseguró que los globos que surcaron los cielos de Estados Unidos eran de su propiedad, pero que no eran espías sino que su función era monitorear las condiciones meteorológicas.
En resumen, la tensión sigue en el aire tras el derribamiento de objetos voladores no identificados tanto en Tobá como en Alaska, y la incertidumbre sigue en torno a la naturaleza y propósito de estos objetos.
