Inversionistas privados ratifican su confianza en la zona conurbada
Por: Mauricio Fernández Díaz
Ciudad Victoria.- Ya se cumplieron cinco meses de la administración de Américo Villarreal, y el estado se mantiene en orden, activo y con planes. En octubre y noviembre de 2022, el panismo lanzó la narrativa de que los índices de inseguridad se habían disparado por la llegada de Morena; quisieron aprovechar dos o tres incidentes para hablar de caos, pero la mentira se esfumó pronto, a tal grado que el gobernador obtuvo una aprobación alta en diciembre. Hoy, esas encuestas coinciden con la opinión de inversionistas privados que recorren la zona conurbada en busca de terrenos para instalar sus empresas.
La perversidad de los cabecistas también buscaba despertar temor entre los empresarios por el nuevo gobierno de izquierda, el primero en la historia estatal, bajo la supuesta amenaza de perder sus inversiones con la actual administración. Pero los hombres de negocios no se dejaron embaucar y fueron en persona hablar con las autoridades para conocer el mercado y las facilidades para la inversión. Y el resultado de esto fue totalmente alentador.
El sabotaje fracasó también porque el gobierno anterior quiso obligar a Chucho Nader a politizar las relaciones institucionales con el doctor Américo Villarreal, pero el alcalde de Tampico evitó ese juego suicida. No existe ningún enfrentamiento entre la administración estatal, de Morena, y la municipal del PAN, ya que son mayores las ganancias de la cooperación que los efectos de la división.
En el contexto actual, el presidente municipal y el gobernador podrán tener ideas políticas opuestas, pero su compromiso con la ciudad y el estado es superior a cualquiera de sus proyectos personales. Y ambos sienten el arraigo de su lugar de origen, a diferencia de García Cabeza de Vaca, quién se crió en Texas y acostumbró sus ojos adorar la bandera de Estados Unidos.
Ese espíritu de cooperación pasó de las palabas a los hechos hace unos días en la zona conurbada de Tampico, donde el doctor Américo Villarreal cumplió una gira de trabajo. Lo esperaban Chucho Nader y los señores José Sarur y Roberto Martínez, directivos de la cadena de hoteles Marriott. Juntos, abordaron un helicóptero y sobrevolaron la zona de la Laguna del Carpintero con el propósito de avistar terrenos apropiados para la posible construcción de un hotel.
Esta clase de proyectos se maduran en total confidencialidad, pero los ejecutivos dieron un mensaje prometedor sobre sus intenciones de invertir en Tampico. Días después del recorrido, Chucho Nader reveló que Grupo Marriott planea construir un hotel de 200 cuartos en un área colindante con el Centro Cultural Metropolitano. El grupo debe primero realizar estudios financieros, de factibilidad y de mercado antes de tomar la decisión, pero las opiniones favorables de su parte sobre Tampico y la zona conurbada han incrementado las posibilidades de hacer la obra.
Aunque tampoco se habló de montos, se sabe que un hotel de las características de Grupo Marriot suele representar una inversión de alrededor de 1,500 millones de pesos. Tan solo en el complejo construido en Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México, de 153 habitaciones, aplicaron 2000 millones de pesos en 2021.
Mientras el afamado grupo hotelero se decide, la inversión pública comenzará a aterrizar en marzo en esta zona, de acuerdo con las proyecciones de la Cámara de la Industria de la Construcción (CMIC). De hecho, en el mismo mes se publicarán las primeras licitaciones correspondientes a las obras planeadas en Tampico, Ciudad Madero y Altamira.
Se trata de proyectos de pavimentación, espacios públicos, rehabilitación y mantenimiento de vialidades, entre otros. Los socios de la cámara están listos para participar con las mejores propuestas en calidad, tiempo y costos, según Gerardo Holguín López, presidente de la Delegación Tamaulipas de la CMIC.
Se trata de un paquete de proyectos con una inversión total de 900 millones de pesos para la zona conurbada, con base en las proyecciones publicadas en el Presupuesto de Egresos de cada uno de los ayuntamientos.
A estas obras se deberán sumar las previstas por el Instituto Tamaulipeco de Infraestructura Física Educativa, y la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Comapa).
Por lo tanto, hablamos de un monto de más de 1,500 millones de pesos que comenzará a derramarse en este mes de marzo.
Esta es también la señal de despegue para los municipios de Tampico, Ciudad Madero y Altamira, que recibirán las primeras transferencias correspondientes al ejercicio 2023, después de 90 días sin más recurso que los ingresos del predial.
La única mala noticia que llega a nuestra redacción es el cabildeo de uno de los funcionarios más protegidos por de Vaca, y que ahora pretende cobrar por sus “servicios” al gobierno de Américo Villarreal. Se trata de Fernando Olvera, ex secretario de Turismo en la administración panista, a quien han visto rondar las oficinas del Centro de Exposiciones.
El gobernador Villarreal no necesita esas ayuditas para lograr la transformación de Tamaulipas, que ya ha comenzado.
