La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha mostrado su preocupación por el brote de cólera en Malaui, que ha registrado cerca de 40,000 casos y más de 1,300 muertes, convirtiéndose en el brote más mortal en la historia del país africano. Según Patrick Otim, epidemiólogo y encargado de Emergencias Sanitarias de la oficina de la OMS en África, en enero de 2023 se ha producido un «aumento significativo» de casos en el continente.
La tasa de mortalidad se sitúa en el 3,3%, cuando se recomienda que esté por debajo del 1%. Además, el brote de cólera se ha extendido a otros países como Mozambique, Zambia, Camerún, Nigeria, República Democrática del Congo, Burundi, Kenia y Etiopía.
El ministro de Sanidad de Malaui, Charles Mwansambo, ha señalado que la mayoría de los casos tienen lugar en cinco distritos, especialmente en las ciudades de Blantyre y Lilongüe, y la mayoría de las personas afectadas tienen entre 10 y 59 años.
La OMS advierte que si continúa esta tendencia, se superarán los casos de 2022, lo que supondría una gran presión sobre los sistemas sanitarios de los países afectados. Es necesario tomar medidas para prevenir y controlar la propagación de esta enfermedad potencialmente mortal.
