*Catarino Erasmo Garza nació en Matamoros y se convirtió en un revolucionario al luchar contra el régimen de Porfirio Díaz; murió en Panamá, tras marcharse a Sudamérica para pelear a favor de los revolucionarios de Colombia
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el Gobierno de México planea iniciar el procedimiento para que los restos del héroe revolucionario Catarino Garza, sean traídos a Tamaulipas, su estado natal.
La misión no será sencilla, pues eso implicaría primero identificar sus restos, que fueron enterrados en una fosa común de la provincia de Bocas del Toro, en el actual territorio de Panamá.
“Ahora que ya estamos en la presidencia pues hablé con el presidente de Panamá. Estamos buscando a Catarino porque lo enterraron en una fosa común y queremos traer sus restos aquí a Tamaulipas”, expresó el presidente durante su visita a Victoria el pasado viernes.
López Obrador ha declarado en múltiples ocasiones su admiración por este personaje de la historia mexicana, incluso publicó un libro sobre su vida titulado “Catarino Erasmo Garza Rodríguez ¿Revolucionario o Bandido?”.
“Catarino Garza inició un movimiento revolucionario en toda esta frontera, en Tamaulipas y Texas, y es una leyenda toda su vida, era un hombre con convicciones y lo empezaron a perseguir el ejército porfirista, los rangers de Texas, el Ejército de Estados Unidos”, narró durante su reunió con la estructura de Bienestar de Tamaulipas.
“De repente desapareció y ¿dónde está Catarino? Porque tenía seguidores, él se formó con el doctor Martínez de San Carlos, otra leyenda en Tamaulipas. Y se fue Catarino a Costa Rica a un puerto. Ahí en Costa Rica se encontró con revolucionarios que luchaban por las independencias. Se encontró con un personaje Uribe que es el coronel que utiliza Gabriel García Márquez para su Novela 100 años de Soledad, el coronel Aureliano Buendía”.
Estando ahí, explicó el presidente, Catarino decidió irse a Colombia a ayudar a los revolucionarios al mismo tiempo que partían de Costa Rica los independentistas cubanos, Macedo y Martí.
“Tiene mala suerte Catarino porque toma un puerto que se llama Bocas del Toro, que ahora pertenece a Panamá. Ahí en Boca del Toro asesinan en la toma del cuartel a Catarino Garza y ahí quedó.
Al año siguiente de su asesinato el comandante que encabezó el enfrentamiento con las tropas guerrilleras, elaboró un reporte, hizo como una historia de lo acontecido y en aquel entonces a todo el que luchaba por la justicia se le llamaba bandido y mi libro se llama Catarino Garza, revolucionario o bandido y lo termino con las frases de este conservador que le hace un gran reconocimiento a Catarino: Quien no, no era un bandido, era un idealista. Era un luchador, un revolucionario”.
LA VIDA DE CATARINO
El historiador Tomás Federico Arias Castro publicó en la revista Relatos en historias en México, un artículo que da cuenta de la vida del tamaulipeco Catarino Garza, quien nació en Matamoros el 24 de noviembre de 1859.
Pasó su infancia y juventud en ese mismo sitio, donde trabajó como tipógrafo, hasta que, tras cumplir dieciocho años, viajó en 1877 a Estados Unidos, radicándose en Texas.
Ese mismo año empezó a trabajar en una casa comercial, donde conoció de cerca las violentas y abusivas circunstancias laborales que debían afrontar múltiples inmigrantes mexicanos que trabajaban en EUA.
“Fue entonces cuando, con el fin de revertir dicha situación, Garza comenzó a organizar varios grupos de carácter mutualista; tal fue el caso de la Sociedad Juárez y el periódico El Bien Público (ambos en 1879), la Sociedad Hidalgo (1880) y la Sociedad Unión Mexicana (1884). Además, ingresó a la masonería y laboró como vendedor de máquinas de coser de la empresa Singer (1882-1883)”.
En 1885 fue nombrado por Porfirio Díaz como cónsul de México en la ciudad de San Louis Missouri, pero muy pronto renunció tras darse cuenta de la fuerte represión política ejercida por el gobierno Desde entonces se convirtió en su opositor, y para ello fundó en Texas los periódicos El Comercio Mexicano (1886) y El Libre Pensador (1887), además del Club Político Mutualista México-Texano (1887).
“En 1888 Catarino Garza reanudó sus acciones denunciatorias, siendo esta vez herido a balazos, lo que originó una pequeña rebelión de mexicanos contra autoridades texanas en la ciudad de Río Grande.
Al año siguiente y con el fin de escribir sus idearios, publicó el libro La lógica de los hechos, o sean observaciones sobre las circunstancias de los mexicanos en Texas desde el año 1877 hasta 1889, iniciando en paralelo los preparativos logísticos para incursionar bélicamente contra el Porfiriato”.
A partir de ese momento, Garza coordinó la compra de armas, convocó a grupos de seguidores, ideó planes de ataque y “redactó dos escritos titulados Plan revolucionario y Proclama, asumiendo luego el rango de jefe constitucional del Norte y nombrando a su partidario Francisco Ruiz S. como general de División, siendo el 15 de septiembre de 1891 cuando incursionó en suelo mexicano a través de la oficina aduanal de Tamaulipas”.
Luego de una intensa actividad bélica en el norte del país, sus tropas fueron sometidas y él volvió al estado de Texas. Pero no cejó en su lucha por la libertad, lo que lo llevó a Centro y Sudamérica.
Finalmente murió el 8 de marzo de 1895, mientras encabezaba una batalla para liberar a prisiones políticos en Bocas del Toro, actual territorio de Panamá.
