Las dos nuevas víctimas fueron ultimadas en Cauca y Nariño. Se completan tres homicidios de estas personas que representan a sus comunidades o trabajan por la defensa de los derechos humanos
Persisten los homicidios de los líderes sociales en Colombia, luego de que tres de ellos fueran asesinados en estas dos primeras semanas de noviembre, pese a que el presidente de la República, Gustavo Francisco Petro, le ha tendido la mano a los grupos armados ilegales en el país para que se sumen a su iniciativa de paz total, pero siguen siguen sin dar muestras de querer parar los actos de violencia en el territorio nacional.
Las víctimas más recientes de este exterminio fueron Dositeo Ojeda Mena en Taminango (Nariño), y Juvencio Cerquera en Sotará (Cauca).
El primero fue ultimado en la mañana del viernes por hombres armados que ingresaron hasta su vivienda en el mencionado municipio caucano. Según informaron en el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), Ojeda Mena se desempeñaba en la actualidad como presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de la vereda Guaycanal y, además, era militante del Pacto Histórico, la coalición de los partidos del actual gobierno.
En la ONG recordaron que para esa población en el suroccidente de Colombia, la Defensoría del Pueblo había emitido la alerta temprana 004 de 2022. “Señala que los liderazgos comunales representan uno de los sectores más afectados, especialmente en territorios con presencia de grupos armados ilegales”, indicaron.
La otra víctima, Juvencio Cerquera, era integrante de la Guardia Indígena, también fue autoridad del resguardo de Paletará y un mayor sabedor. ”Hacía parte del proceso de liberación de la Madre Tierra que se adelante en el municipio”, agregaron en Indepaz.
En esa ONG informaron que este líder social fue asesinado en medio de las tensiones que hay por la tenencia de la tierra entre la comunidad indígena y la multinacional Smurfit Kappa Cartón Colombia. Agregaron que, de acuerdo con los medios locales, más personas resultaron heridas por dicha situación en la región.
“Tanto la Defensoría del Pueblo como la Personería del municipio han hecho presencia en la zona con el fin de buscar una mediación entre las partes para que no escalen aún más las tensiones”, señalaron.
Previo a estos dos homicidios se reportó el de Edgar Ayala Pinto, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) del barrio Ciudad Rodeo, en el occidente de Cúcuta (Norte de Santander).
“Aproximadamente a las 6 de la tarde, fue objeto de un atentado. Posteriormente es traslado a la clínica Médical Duarte donde lamentablemente fallece. Estamos activando todas nuestras actividades de Policía judicial e inteligencia para dar con los móviles y la posterior captura de los sujetos que pudieron haber cometido este hecho”, informó el coronel Ivan Mauricio Pardo, subcomandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta.
Indepaz indicó que hombres armados lo interceptaron cuando se encontraba junto con su hijo en el parqueadero del conjunto residencial en el que residía.
“Fue trasladado a la clínica Medical Duarte, pero falleció por la gravedad de las heridas, y su hijo resultó herido”, indicaron en esa ONG.
Esto tres nuevos crímenes de líderes sociales se dan luego de un octubre sangriento para estas personas que alcanzó la escabrosa cifra de 15 homicidios.
Aunque hubo optimismo en septiembre, ya que la cifra de homicidios de estas personas llegó a ocho en ese mes, cuando se tiene un promedio de 13 crímenes mensuales, pareciera que en el país se sigue sin avances para salvaguardar la vida e integridad de estas personas.
