Por: Mauricio Fernández Díaz
Prepara PAN guerra sucia contra Gobierno de Tamaulipas
Ciudad Victoria.- Información fresca revela que Acción Nacional ha instrumentado ya una campaña de lodo y calumnias contra el Gobierno de Tamaulipas surgido de morena. Se trata de una estrategia planificada desde el centro del país por las dirigencias nacionales del PAN y del mismo PRI, su aliado político. No quieren dejar títere con cabeza en la entidad ahora que habrá “licencia” para difundir ataques contra la administración de Américo Villarreal Anaya, cuando arranque la campaña extraordinaria por la senaduría vacante.
Fuentes cercanas al búnker nos aseguran que los cabecistas han organizado su campaña con más esmero que la de gobernador, en la que perdieron. Han segmentado la información “comprometedora” por temas: diputados morenistas, funcionarios estatales, gobernador y su familia, nexos con delincuentes y malos resultados. Afirman que poseen archivos para pararle los pelos a cualquiera, y no descartamos que pueda tratarse de escuchas telefónicas, aunque jamás oir voces de figuras de la 4T en una grabación no prueba que sean auténticas o que estén libres de ediciones.
Cabe recordar que este espionaje ilegal, que no es otra cosa que un delito, ya fue utilizado contra la diputada Úrsula Salazar Mojica, sobrina de López Obrador, y se integró a una carpeta penal con intenciones de desaforarla. En estas maniobras colaboró el siniestro Irving Barrios, Fiscal General del estado impuesto por García Cabeza de Vaca para seguir en el puesto durante el mandato del doctor Villarreal y proteger los intereses del PAN.
Quizás no sea casualidad que hayan hackeado recientemente los WhatsApp de Carlos Peña, alcalde de Reynosa, y de su mamá, Maki Ortiz, exprecandidata a la gubernatura. En febrero de este año, Lalo Gattas, alcalde de Ciudad Victoria, también denunció el hackeo de su cuenta de Telegram, aunque muchos lo tomaron como una más de sus mentiras después del supuesto atentado a balazos en su oficina, que jamás demostró. Sin embargo, nos han reportado que algunos secretarios han tenido ataques cibernéticos en sus cuentas personales, pero no lo han querido publicar para no verse vulnerables.
Justamente por eso se llaman campañas negras: se roba información personal, se atenta contra la privacidad y, de plano, se miente o se distorsiona la verdad. Los autores de estas infracciones no trabajan desde las oficinas o computadoras del PAN ni de sus aliados; no son tontos. Contratan a delincuentes cibernéticos para que lancen estos ataques desde domicilios particulares y granjas de bots. Saben ocultarse en la selva del Internet y solamente otro hacker o la policía tecnológica son capaces de ubicarlos. Ya hay despachos formales que prestan este inmundo servicio a gobiernos, partidos, empresas e instituciones. Bueno, uno de estos, bajo contrato de confidencialidad, estaría orquestando la campaña que se aproxima.
También contarán con apoyo de un sector de la prensa estatal, y no precisamente la cabecista. ¡Hablan de informadores que cuentan con plazas en gobierno y que presumen amistad con el doctor Américo! Sinceramente, nos suena a fanfarronada, aunque en esta vida hay cada Judas Iscariote de no creerse.
Los primeros ensayos de este complot se pueden visualizar en algunas publicaciones del PRI que resaltan errores y los supuestos daños a la población causados por las políticas públicas de Morena. La oposición utilizará en contra de la 4T la falta de recursos al estado y los municipios en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2023. Todos los temas polémicos relacionados con la izquierda, hasta el matrimonio igualitario, serán explotados con fines políticos.
De hecho, ya comenzaron a restregar a la población las obras suspendidas por el PEF del año siguiente. Culpan a Morena de la cancelación del acueducto Victoria, de los diques del río Tamesí en Tampico, del nuevo Hospital Civil de Ciudad Madero, que fueron los proyectos solicitados a los legisladores morenistas de la entidad. Ninguno fue enlistado en el programa de infraestructura federal. Por lo tanto, no le destinarán ni un peso, por lo menos en 2023.
Todos los temas polémicos y difíciles de conciliar con las mayorías, como el matrimonio igualitario y la reforma electoral, serán manipulados en perjuicio de Morena y de su candidato a senador. Se pretende no dejarlo ni respirar, confrontándolo con uno y otro escándalo.
No descartan incluso la presentación de nuevas demandas penales contra figuras morenistas por corrupción y delincuencia organizada, aunque las pruebas sean igual de inventadas que las usadas para quitarle la victoria a Américo Villarreal, que acabaron en fracaso. ¿O acaso creen que la reforma para darle el manejo del C-5, la UIF y los servicios de inteligencia al fiscal panista Irving Barrios era solo una ocurrencia o pura simulación? Es aquí cuando todo adquiere sentido y se puede medir la magnitud de la lucha por el poder.
La calumnia, la zancadilla artera, la mentira y la competencia desleal siempre ha sido el sello de Francisco García Cabeza de Vaca, y ha visto ahora la oportunidad de volver a las andadas, nada menos que como el candidato a la senaduría extraordinaria. Hasta Miguel Ángel Osorio Chong lo apoya en esta aventura.
Tamaulipas está a punto de entrar a una nueva lucha de agresiones, tres meses después de los pleitos judiciales por la elección del 5 de junio.