Por: Vicente Hernández
“Si la piel de todos los homosexuales se volviera morada de la noche a la mañana, la sociedad, sorprendida por la enorme cantidad y diversidad de gente a su alrededor con ese color, dejaría de ver esto como un problema”.
‹Ian Mckellen›
Una buena noticia recibieron las personas con preferencias diferentes, ya que el día de ayer fue aprobado el matrimonio igualitario en todo México luego que Guerrero y Tamaulipas quienes eran los últimos estados que faltaban que lo aprobaran quedo finiquitada con la iniciativa de ley que fue presentada ante el Congreso por la diputada por el Partido Acción Nacional (PAN), Nancy Ruíz Martínez, que fue Secretaria de Morena en el CDE y presidenta del comité directivo municipal de Morena en Altamira, ya que su propuesta contó con 23 votos a favor, 12 en contra y 1 abstención, y con esta resolución del Congreso se reformará el artículo 132 del Código Civil del estado, en el que quedará establecido que “quienes contraigan matrimonio deben ser mayores de edad”, esto sin distinción de género.
Cabe destacar que un día antes, el matrimonio igualitario también se aprobó en Guerrero con 38 votos a favor, seis en contra y dos nulos, en este estado la reforma fue propuesta por los diputados militantes de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Jacinto Rodríguez Varona y Yoloctizn Domínguez Serna. Con esta nueva ley, serán dos las vertientes por las que deberán navegar los grupos Lesbico Gay, debido que con esta aprobación de ley no quiere decir que la homofobia se termine, ya que en México como en algunas partes del mundo prevalece la homofobia, toda vez que la mayoría de los jóvenes y adultos mayores no aceptan la homosexualidad, otra de las dificultades que tendrán que afrontar derivada de esta homofobia, serán las agresiones y burlas de parte de grupos religiosos y grupos conservadores, quienes siempre estuvieron en contra de que se aprobara la citada ley.
Revisando un estudio sobre la medición de la homofobia la homonegatividad y el heterosexismo en México, escrito por Ignacio Lozano Verduzco y Rolando Díaz-Loving destaque lo siguiente: “El término homofobia fue popularizado por primera vez en la academia en 1973 por, el psiquiatra Weinberg en su libro titulado “Society and the Healthy Homosexual”. El autor lo definió como una fobia acerca de los homosexuales, que parece estar asociada con un miedo al contagio, un miedo a que se reduzcan las cosas por las que uno peleó, como el hogar y familia. Según el autor, era un miedo religioso y llevó a una gran brutalidad, como cualquier miedo lo hace. En específico, el autor se refería al miedo de estar cerca de una persona homosexual y al odio que se tiene así mismo el propio homosexual (Weinber, 1972). Algunas definiciones indican que se trata de un miedo irracional a la homosexualidad (Herek, 2008). La homofobia es por tanto un constructo que incluye respuestas emocionales como el miedo, la ansiedad, enojo, incomodidad y aversión que algún individuo experimenta al estar interactuar con personas homosexuales y que se construye socio-culturalmente”
No se usted, pero yo en lo personal, y en lo profesional, tengo amigos homosexuales y amigas lesbianas y no siento ninguna fobia hacia ellos, y el trato es tan normal como pienso lo hace la mayoría de la gente, aunque algunos evitan tratarlos, y algunos hasta saludarlos, temiendo algún contagio como dice en el estudio anterior, y su presencia se hace cada día mas notoria en dependencias municipales, estatales, y federales, incluso hemos llegado a tener candidatos a puestos de elección popular, presidentes, diputados, senadores y funcionarios públicos de los tres niveles de gobierno que tienen preferencias sexuales diferentes, algunos ya declarados y algunos otros de closet, pero no por eso su desempeño es menor al de las personas heterosexuales.
La homosexualidad es tan vieja como la creación del mundo, y no es exclusiva del ser humano, ya que existe en la especie animal así como en la vegetal, si hojeamos la historia encontraremos que la homosexualidad al igual que la prostitución van a la par, y si buscamos en relatos religiosos en la Biblia hebrea, aunque de manera velada describen actos o personajes vinculados a la homosexualidad, y quizás solo en un estado de la república, en la región del Istmo de Tehuantepec en el estado de Oaxaca, en el sur de México, hay tres géneros: hombres, mujeres y muxes, esta tercera clasificación ha sido reconocida y celebrada desde la época prehispánica, y es difícil imaginar la vida sin muxes aquí, y no solo están clasificados como un tercer género, también son muy respetados y sus organizaciones contribuyen en mucho a la cultura, porque son férreos defensores de sus tradiciones y folclor.
En el cine, sobre todo en el de avanzada o progresista, existen películas donde se presenta la homosexualidad con toda naturalidad, sobre todo en las del español Pedro Almodóvar, en lo particular recuerdo dos, en las cuales se denuncia la homofobia por decreto de estado, y por conservadurismo pueblerino, la primera es una película cubana titulada “Fresas y chocolate” y la segunda “El lugar sin límites” pero en fin que esta ley ya fue aprobada, y con ella se abre todo un mundo de esperanzas para las personas de preferencia diferentes en cuanto a herencias, registro ante el Seguro Social, derechos a pensiones, y algunas otras cosas más, que les traerá como beneficio la aprobación de esta tan esperada y controvertida ley.
