Por Mauricio Fernández Díaz

Indagan a Mario Gómez Monroy y Magdalena Moreno por desfalcar a la SET

Ciudad Victoria.- La decadencia política de Tamaulipas facilitó el reparto de cargos a parientes y amigos de la familia García Cabeza de Vaca, quienes malgastaron los recursos de secretarías fundamentales para la atención de los ciudadanos, como salud y educación. Por ello, diversas personas exigen al gobierno de Américo Villarreal que castigue a Mario Gómez Monroy y Magdalena Moreno Ortiz por delitos graves y administrativos.

Con el triunfo de Morena en la elección del pasado 5 de junio, los ciudadanos expresaron un “¡Alto!” al saqueo y la corrupción de funcionarios, amigos y hasta amantes de funcionarios del gobierno panista. Confiamos en que la nueva administración entenderá el mensaje.

Ningún posgrado académico o vocación magisterial mostraba Mario Gómez Monroy como Secretario de Educación en Tamaulipas (SET); su parentesco con Mariana Gómez, esposa del gobernador, respaldaba su nombramiento: eran primos. Sin embargo, Magdalena Moreno Ortiz, en su calidad de subsecretaria de Educación Básica, estaba aún peor: desplazó al único doctor de esa secretaría, Julio Pimienta Prieto, gracias a haber trabajado como nana de los hijos de Cabeza de Vaca, según versiones publicadas en internet.

El primo y la niñera derrocharon el presupuesto educativo y frenaron el desarrollo de la niñez tamaulipeca, sobre todo durante la pandemia. La educación fue la asignatura con peores resultados en el gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca, y conviene ir a las pruebas para recordarlo siempre.

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) señaló un manejo irregular e injustificado de dos mil 93 millones de pesos a la SET, correspondiente al ejercicio de 2020, es decir, a Mario Gómez Monroy (el primer año y medio fue titular Héctor Escobar, otro amateur del gobierno panista).

El faltante provenía del Fondo de Aportaciones a la Nómina Educativa, que la Federación enviaba puntualmente a Tamaulipas para salarios de maestros en la entidad, aunque el equipo de Cabeza de Vaca administraba el recurso con los pies.

De acuerdo con la auditoría de ese año, el gobierno de Tamaulipas mostró un humanismo extraño como servidor público: ¡le pagaba un millón 150 mil pesos a maestros muertos! Lo más intrigante era que los difuntos los “cobraban”. En el dictamen de 2020, la Tesorería de la Federación indicaba que la administración cabecista seguía sin devolver el importe, a pesar de la flagrante equivocación que cometía.

Antes de 2020, Tamaulipas reintegró a la Federación 943 mil 700 pesos de depósitos efectuados a los muertos, pero el tema seguía sin resolverse del todo.

Con el primo de Cabeza de Vaca, la SET ejerció pagos a particulares cuyos datos del RFC no existían en los registros del SAT, se utilizaron Claves Únicas de Registro de Población (CURP) que no estaban incluidas en los archivos de la SEGOB, y se manosearon los datos de una RFC para varios CURPS, y al revés, una sola CURP para varios RFC.

Injustamente, la secretaría solo pudo devolver 943 millones de pesos del total de las observaciones, y dejó pendientes 1,149 millones de pesos de la cuenta de 2020.

Ese año, a la dependencia de Gómez Monroy le transfirieron 13 mil 325 millones 997 mil 700 pesos, y los gastó como lo creyera conveniente, de acuerdo con las atribuciones fiscales de entonces. Sin embargo, nunca esperó que la Federación fuera a auditar el 90 por ciento de esos fondos. Nunca devolvió la totalidad de los rendimientos financieros que se le reclamaron.

Hasta aquí las cuentas descuadradas del primo de Cabeza de Vaca en 2020, y quedarían por sumar las de 2021 y 2022. Mario Gómez defraudó a los tamaulipecos y su nombre no se olvidará tan fácilmente. Del mismo modo, también se recordará el de Magdalena Moreno Ortiz por la mediocridad y las vergüenzas de su comportamiento dentro y fuera de la Subsecretaría de Educación Básica.

¿Quién es capaz de olvidar la trifulca de provocó durante un festejo navideño, en diciembre de 2018, acompañada supuestamente de su amante, en la que un hombre resultó herido en el abdomen con un cuchillo?

Maggie se embriagó en esa posada con Javier Cardona Salazar, encargado de Programas Transversales, quien no se le separó en ningún momento mientras reían y se mimaban el uno al otro.

Al parecer, hubo un incidente de tránsito con un vecino y después una pelea, motivo por el cual llegó la policía, tránsito municipal y una ambulancia a la calle Marte R. Gómez, del fraccionamiento del Valle.

Ante la presencia de los agentes, Magdalena comenzó a dar órdenes para que se retiraran y no se metieran con ella y su acompañante. Apestaba tanto a alcohol que no fue necesario practicarle la prueba de alcoholemia para saber que estaba borracha.

La subsecretaria y el encargado de programas amanecieron tras las rejas del 2 Zaragoza. Una llamada desde Palacio de Gobierno terció para que la liberaran.

Magdalena Moreno Ortiz malgastó también los recursos de la Subsecretaría de Educación Básica y hundió a Tamaulipas en los últimos lugares por su incapacidad para atender a los niños durante la pandemia del COVID-19 y la suspensión de clases.

Llegó la hora de darles una lección a estos falsos representantes de la educación.