Rosario Lilian Rodríguez Barraza y Sandra Luz Hernández tenían la esperanza de encontrar a sus familiares. Las mataron en Sinaloa por su lucha incesante
La noche del pasado martes 30 de agosto se dio a conocer el asesinato de la activista y madre buscadora Rosario Lilian Rodríguez Barraza, quien desde hace tres años se dedicaba a dar con el paradero de Fernando Abixahy Ramírez Rodríguez, su hijo desaparecido en La Cruz de Elota, Sinaloa; así lo confirmó el gobierno de esta entidad mediante un mensaje publicado en sus redes sociales.
Rodríguez Barraza lideraba «Corazones sin Justicia» de Elota, un colectivo de personas dedicadas a la búsqueda de personas desaparecidas en la zona sur de la entidad. El hijo de la activista confirmó que ya había sido intimidada en varias ocasiones por el crimen organizado debido a su labor.
De acuerdo con los testimonios de algunos testigos, Rosario Lilian fue privada de la libertad por un comando armado después de salir de una misa que se realizó en conmemoración de las personas desaparecidas; horas más tarde su cuerpo fue encontrado sin vida junto a las vías del tren en el municipio de Elota.
Conmoción por el asesinato de la activista
Según las primeras informaciones que se dieron a conocer el día de ayer, el “levantón” ocurrió cuando Rosario Lilian Rodríguez Barraza se dirigía a su casa, ubicada en Palos Blancos, acompañada de su hijo Alonso, quien presenció la escena.
Fue alrededor de las 9 de la noche, cuando ambos caminaban junto a las vías del tren, el momento en que la activista fue interceptada por pistoleros, quienes se la llevaron por la fuerza, para posteriormente quitarle la vida. Su cuerpo fue encontrado cerca de las 23: 20 horas, cerca del lugar en donde fue privada de su libertad.
El hecho se dio justo en el «Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada», cuando diversos colectivos y grupos de búsqueda de personas desaparecidas realizaron protestas en todo el país, incluida la Ciudad de México, para exigir a las autoridades justicia ante las constantes desapariciones.
El mismo martes 30 de agosto algunos colectivos sostuvieron un encuentro con el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, quien en ese momento les ofreció garantías a quienes conforman estos grupos de búsqueda.
Gobernador de Sinaloa lamentó el asesinato de Rosario
La confirmación del asesinato de la activista Rosario Lilian Rodríguez Barraza fue dada a conocer por el propio gobernador Rubén Rocha Moya, quien este miércoles mediante un mensaje publicado en Twitter lamentó su muerte:https://d-19305532163309688007.ampproject.net/2208172101000/frame.html
“Lamento profundamente el asesinato de Rosario Rodríguez Barraza, luchadora incansable como muchas otras mujeres sinaloenses que buscan a sus seres queridos”. Además, el gobernador informó que había dado indicaciones para iniciar una investigación que conduzca a la detención de los responsables del crimen:
«En la mesa de seguridad, tomamos medidas para que se lleve a cabo una investigación a fondo para dar con los culpables de tan artero crimen. Mi solidaridad para sus seres queridos y para los colectivos de personas buscadoras y buscadores de sus familiares”, declaró.
Dos madres buscadoras han sido asesinadas
Rosario Lilian Rodríguez Barraza es la segunda madre buscadora asesinada en Sinaloa en años recientes, luego que en 2014 Sandra Luz Hernández, de 50 años, fue asesinada por Jesús Fernando Valenzuela Rodríguez, quien confesó el crimen, pero por una presunta falta de pruebas fue dejado en libertad al año siguiente.
Sandra, al igual que Rosario, también formaba parte de un colectivo: el «Grupo de Familiares con Hijos Desaparecidos», mediante el cual buscaba a su hijo Édgar García Hernández, joven que fue secuestrado el 12 de febrero de 2012 cuando trabajaba como mensajero en la oficina del entonces procurador de justicia de Sinaloa, Marco Antonio Higuera.
Luego de denunciar la ausencia de investigaciones en torno al caso de su hijo, Sandra Luz fue citada por un desconocido, quien supuestamente le habría prometido información acerca del paradero de Édgar.
La fecha acordada fue el 12 de mayo de 2014 y el punto de encuentro la Colonia Benito Juárez, en el centro de Culiacán; hasta ese sitio se dirigió Sandra Luz, sin embargo fue asesinada por un un sujeto encapuchado que le disparó en 15 ocasiones. Su homicidio ocurrió 25 meses después de la desaparición de su hijo.
“Nadie se va impune, tarde que temprano, pero en algún momento nos vamos a encontrar con esos responsables de esos delitos que lastiman mucho a la entidad”, habría declarado el entonces gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez dos días después del homicidio.
A la semana del asesinato de Sandra Luz las autoridades presentaron al presunto homicida, Jesús Fernando Valenzuela Rodríguez, quien confesó haber sido el autor material.
El hombre dio a conocer el lugar donde había escondido el arma que utilizó así como la ropa que portaba aquel día, misma que tenía manchas hemáticas. Estos objetos fueron encontradas en el punto señalado, no obstante, el 13 de marzo de 2015 el juez Sergio Valdez Meza liberó al homicida confeso, argumentando falta de pruebas.
Hombres armados buscaban a la activista
Alonso Ramírez Rodríguez, hijo de Rodríguez Barraza, declaró a El Heraldo de México que hombres armados buscaban a la activista y le advertían que abandonara la búsqueda de su hijo Fernando Abixahy, algo que no dejó de hacer. «En diversas ocasiones se supo que había recibido amenazas», señaló en entrevista.
Desde que inició la búsqueda de su hijo, Rosario Lilian comenzó a destapar la situación de violencia que se vive en el municipio de Elota y con su búsqueda dejó al descubierto la verdadera situación que impera en esta zona de Sinaloa en materia de desapariciones, por lo que al parecer esta situación pudo haber incomodado a integrantes del crimen organizado.https://d-19305532163309688007.ampproject.net/2208172101000/frame.html
La última búsqueda en la que participó Rosario
De acuerdo con Mirna Medina, fundadora del colectivo «Las Rastreadoras de El Fuerte«, la última búsqueda en la que participó Rosario Lilian fue el pasado 20 de agosto cuando acompañó a un grupo de búsqueda de desaparecidos en Mazatlán, indicó en entrevista con El Heraldo de México.
En aquella ocasión la activista halló un cuerpo en un lugar cercano a Elota, que se llama Playa Ceuta, un sitio en el que se han localizado varios cuerpos, destacó.
“Quien haya sido (el autor del crimen) es muy lamentable esta situación, pues ella pasa a ser una víctima más de este tema tan fuerte en el que estamos nosotros, que es la desaparición”, declaró la activista durante la entrevista.
ONU condena «atroz» asesinato de Rosario Lilian
La Oficina en México del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó este miércoles el “atroz” asesinato de la activista Rosario Lilian Rodríguez Barraza, «madre buscadora de Sinaloa», ocurrido la noche del martes 30 de agosto en el municipio de Elota, Sinaloa.
El crimen «es una evidencia más de la dura situación que enfrentan las familias de personas desaparecidas en México,» quienes también son defensores de los derechos humanos, declaró el organismo en un comunicado.
“La privación de la libertad y el asesinato de la señora Rosario Lilián se da en el marco de la conmemoración del Día internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, el 30 de agosto, fecha en la que colectivos y familiares de personas desaparecidas se manifiestan públicamente para exigir justicia a las autoridades, así como la localización de sus seres queridos”, señaló Guillermo Fernández-Maldonado, Representante en México de ONU-DH.
“Resulta atroz y desgarrador que mientras amplios sectores de la sociedad se solidarizan con las madres buscadoras, haya quien les agreda a todas ellas, asesinando a una de sus hermanas de causa. Pese al dolor de este cruel mensaje criminal, sabemos que la marcha de las madres que buscan a sus seres amados en México no se detendrá”, indicó Fernández-Maldonado en el informe.
La ONU-DH hizo un llamado a las autoridades correspondientes «a investigar con prontitud y diligencia el asesinato de la señora Rosario Lilián Rodríguez. Impulsar una investigación exhaustiva que agote todas las líneas de investigación relevantes, incluida la relación del asesinato con la desaparición de su hijo y su labor de búsqueda. En el curso de la indagatoria se debe garantizar una perspectiva de género y tomar en consideración su condición de defensora de los derechos humanos. Asimismo, las autoridades deben también brindar una atención integral a su familia conforme los estándares internacionales”.
