Por:Mauricio Fernández Díaz
Ciudad Victoria.- En este mundo incierto la única ley es el cambio, lo fugaz, lo transitorio. Por fuertes que parezcan, ni las tiranías son eternas. Personas que por sus talentos estaban llamadas a dirigir naciones nunca llegaron a realizarse. Y, así, lo que hoy se considera seguro mañana ya no existe. Hace cinco meses Francisco García Cabeza de Vaca era uno de los presidenciables para la elección de 2024. Hoy ya no figura en esa lista.
Ninguna imagen revela mejor la debacle de un político que ese cambio de favorito a rechazado, de promovido a ignorado. El 14 de marzo, Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, declaró al reynosense uno de sus “buenos prospectos” para la elección presidencial venidera. Pero el 21 de agosto, consultado sobre las figuras panistas que podrían competir por la presidencia, simplemente lo omitió.
Y no era poco el entusiasmo de su comentario hace cinco meses. “Tenemos buenas cartas para la presidencia de la república, y ciertamente Cabeza de Vaca es uno de nuestros buenos prospectos”. Tres doritos después, como dice el meme, esos buenos prospectos fueron otros.
Ahora, los gobernadores panistas mejor posicionados para la candidatura, según Cortés, son Mauricio Vila, gobernador de Yucatán; Maru Campos, de Chihuahua, incluso Mauricio Kuri, de Querétaro, que no alcanza ni un año cumplido como gobernador.
Para mayor humillación de Cabeza de Vaca, sujeto egocéntrico y vanidoso donde los haya, otros incluidos en la lista de presidenciables del PAN fueron Lilly Téllez, senadora, y hasta un alcalde, Renán Barrera, de Mérida.
La lista larga de propuestas, donde no incluyeron ni en último lugar al tamaulipeco, se completa con Ricardo Anaya, candidato perdedor en 2018; Juan Carlos Romero Hicks, ex gobernador de Guanajuato y actual diputado federal, e incluso Santiago Creel.
Estamos en condiciones de informarles lo siguiente: la dirigencia nacional, en acuerdo con Ricardo Anaya y un grupo cerrado de figuras, ya le ordenaron a Marko Cortés desmarcarse de Francisco García Cabeza de Vaca antes de que sus delitos terminen por extinguir las pocas posibilidades de Acción Nacional de llegar al 2024.
Panistas respetados conocieron parte (y mínima, por cierto) de las carpetas de investigación contra Cabeza de Vaca, y quedaron estupefactos; el reynosense no se robó el palacio de gobierno solamente porque es un edificio de piedra, que si no…
Pero lo que más los abochornó fue la omnipresencia de Ismael García Cabeza de Vaca en las operaciones de importancia y hasta en la designación de funcionarios y candidaturas. El más inferior de todos los panistas tamaulipecos se imponía sobre personajes de gran trayectoria y mérito. De plano, a Francisco Javier se le pasó la mano con la impunidad fraternal; Ismael dirigía hasta al partido. Su única virtud, su sola credencial: ser hermano del gobernador.
Cuando la justicia le eche el guante y exponga detalles de los delitos, las circunstancias y las personas involucradas, el PAN nacional tendrá que recurrir a la consabida fórmula “Acción Nacional exige el derecho a la presunción de inocencia, pero no se hace responsable de los actos de terceros”. Por último, le dará la bendición a Cabeza de Vaca y dejará de acompañarlo.
Tamaulipecos cercanos a la directiva nacional nos han confirmado este distanciamiento que ya se refleja en la lista del PAN para la candidatura presidencial. Marko Cortés ha cambiado la línea de acción y Cabeza de Vaca ya no será motivo de presunción ni de orgullo para el panismo.
También sabemos que el reynosense tomó a mal este viraje de su partido pero no puede perder tiempo en conflictos con el PAN. Tiene que resolver su situación de manera que burle la orden de captura. Nos informan que sus desvelos los gasta en planes de decretos y otras reformas extravagantes que le den un poco de inmunidad después del 30 de septiembre.
Cabeza de Vaca fue abordado ayer martes en el Polyforum Victoria y se le interrogó sobre la transición, de la que tanto se ha quejado el equipo de Américo Villarreal. El panista cantinfleó y dijo apegarse a derecho para no hacer “de más ni de menos”. ¿No hacer de más? ¿Entregar los inventarios, algo tan básico, es hacer de más? ¡Que lo compre quien no lo conozca!
Mitomanía, delirio de grandeza, autocomplacencia, Cabeza de Vaca entra en la recta final de su gobierno sin un ápice de templanza ni reconciliación. Las siguientes serán las peores horas para Tamaulipas, ya que el panista ha demostrado que es capaz de todo cuando fallan sus planes o alguien afecta su voluntad.
El PAN nacional ha reconocido que solo lo perjudica. Por eso ha pasado de presidenciable a enjuiciable.
