Por: Vicente Hernández
“El honor de un pueblo pertenece a los muertos, los que viven solo lo usufructúan.”
‹George Bernanos›
La noticia la dio un diario local: “Acusa el presidente municipal de Irapuato Guanajuato, Alejandro Navarro Saldaña, que el gobierno federal pretende apropiarse de las momias que desde 1997 por Ley le pertenecen a este municipio”.
De comprobarse esta intención del gobierno federal, me parece una buena idea, ya que gran parte de la “Momiza” que esta trabajando para López Obrador ya están muy vistos, pero yo sugeriría que no fuese expropiación, sino más bien cambio, o en términos ajedrecistas un enroque.
Que coloquen en el museo paraditos y muy serios, a la Senadora Olga Sánchez Cordero, que parece que ya perdió la cordura, pues quiere reelegirse para el 2024, también el Secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández es candidato natural, porque con eso de que “Yo tampoco confió en usted” el primo de Andrés Manuel, al parecer sufre de demencia senil, y ya no se acuerda que hace tiempo que se murió.
Layda Sansores es la perfecta candidata para su traslado con todo y ataúd a Irapuato, y que en su lugar dejen a su hermana gemela Irma Serrano “La Tigresa”, para que continúe con el gustado programa televisivo “La hora del jaguar”, Manuel Bartlett Díaz, director de la Comisión Federal de Electricidad tiene los siglos perfectos para ocupar una vitrina en el museo guanajuatense, con un letrero que diga CFE (Cometió Fechorías Elegantemente).
El Dr. Jorge Carlos Alcocer Varela es ideal, ya que durante las mañaneras calla como “Momia” sobre las muertes por Covid 19, el titular de la Secretaria de Turismo Miguel Torruco Marqués, tiene el perfil, ya que además de la edad, en los ratos que no esté en su féretro puede organizar recorridos guiados para el turismo que acuda para ver a sus compañeros.
De verdad, ojalá que mi humilde opinión sea tomada en cuenta, y el enroque se haga realidad, porque los mencionados funcionarios ya estando en exhibición le harán menos daño a la sociedad, solo les pediría de favor que no manden a este mismo museo al “Santo el enmascarado de plata” porque que santa madriza les va a poner, como una santa venganza por las santas fechorías cometidas en agravio de México. –Chale
Y ya que estamos en el tema necrológico, la Diócesis de Tampico le solicito a las autoridades mas vigilancia en los cementerios municipales por dos razones 1-Para evitar que se realicen actos de brujería o “misas negras” ya que estas acciones son contrarias a los ritos practicados por la Iglesia católica. 2-Frenar la profanación de tumbas, que en los últimos meses se ha venido denunciando, y que la Diócesis le atribuye a brujas o santeros, o quizás a prácticas de Vudú haitiano, ya que los muertos sepultados en un panteón aparecen en otro lugar distante de donde reposaban.
Yo como dice el clásico “tengo otros datos” en el primer punto, creo que mas que misas negras, son grupos de jóvenes que se reúnen para destramparse con alcohol y drogas sobre alguna tumba, para crear un ambiente agradablemente tenebroso, y me parece un desperdicio, que elementos de la Guardia Nacional o la Policía Estatal se la pasen vigilando un panteón, cuando pueden estar realizando tareas más edificantes y productivas, como bolsear borrachitos trasnochadores en las calles de la ciudad, sobre el segundo punto, pienso que los muertos cansados de su postura, y encerrados tanto tiempo, salieron a tomar aire fresco, algunas cervecitas, y a estirar las piernas (o lo que les quede de ellas) ahora si que como dice la canción: “No estaban muertos, andaban de parranda”
Y antes de que me juzguen loco y me quieran enviar a la casa de la risa, o al museo de Irapuato “Voy por otras y me regreso”
