Por:Mauricio Fernández Díaz
Ciudad Victoria.- Podemos decir con certeza que el gobierno de Américo Villarreal arrancará con proyectos de inversión pública mayor, de los cuales se desprenderán beneficios como derrama económica y empleo. Ante la sequía de obras del cabecismo, esta es una gran noticia para los tamaulipecos.
Tanto en México como en el resto del mundo se vive una triple crisis de inflación, escasez de productos y bajo crecimiento. Por eso no es casualidad que aumenten las caravanas de migrantes hacia Estados Unidos. La desesperación agobia a las familias y comienza a afectar también a los empresarios. En estas circunstancias, siempre se ha planteado la necesidad de aumentar la inversión pública para aliviar, incluso impulsar, el crecimiento. Y las obras que están por aterrizar en Tamaulipas favorecerán en ese sentido.
Como resultado de la visita oficial del presidente López Obrador a Estados Unidos, México acordó una inversión de 14 mil 598 millones de pesos para reforzar 19 aduanas y ampliar los puertos de entrada. Los trabajos comenzarán de inmediato y correrán a partir de este año.
De acuerdo con la Agencia Nacional de Aduanas de México, estos trabajos comprenden ampliaciones, pavimentación, reforzamiento de estructuras, modernización de mobiliario, reordenamientos y rehabilitación de oficinas, entre otros.
Entre los proyectos destacados se encuentra la ampliación del puerto de entrada San Jerónimo-Santa Teresa, así como la del puente y puerto de entrada Reynosa-Pharr, que a los tamaulipecos interesa.
Las obras de infraestructura mayor serán un nuevo puerto de entrada, el Mesa de Otay II, y la reubicación de la línea férrea en Nogales. Todos los trabajos están confirmados, ya que el Gobierno Federal ha autorizado a la Sedena los 14 mil 598 millones 276 mil 233 pesos que costarán los arreglos y modificaciones.
A este presupuesto el gobierno de la 4ª Transformación agregará otros 17 millones 210 mil 800 pesos en 12 proyectos para nuevos cruces y puentes, así como para ampliaciones a puertos de entrada. En todos los casos, Tamaulipas será favorecido por este plan del Gobierno Federal, ya anunciado oficialmente en la reunión con la administración de Joe Biden, ya que el estado cuenta con 17 puentes fronterizos y hasta 53 puestos y garitas de entrada a Estados Unidos.
De hecho, tras la reapertura de las fronteras después de la pandemia del Covid-19, Tamaulipas y Baja California fueron los estados de la región con más actividad comercial del país, y se espera que el intercambio se incremente en los dos próximos años. Para entonces, Américo Villarreal estará despachando en Palacio de Gobierno.
Será un comienzo sólido, relevante y valioso para el nuevo mandatario, y aún vendrán otras acciones que se verán de inmediato. A fin de que los panistas no intenten «calentar” la plaza tras la salida de Cabeza de Vaca, ya coordinó tareas en materia de seguridad con el secretario César Augusto López para que entren en operación desde el primer día de la administración.
Tan excelentes noticias no podían caer bien en los oídos de los conservadores, quienes han intentado interpretar estos proyectos, a través de los medios de comunicación, como acciones para frenar el paso de migrantes y agradar a Estados Unidos.
Ya interrogaron a Marcelo Ebrard sobre este asunto, y el canciller fue categórico: “Ese no sería el objetivo. El objetivo es facilitar el comercio”.
Por si no quedara claro, Francisco Garduño, comisionado del Instituto Nacional de Migración, en otro momento del día, también negó que los trabajos en la frontera sean para reforzar la seguridad anti-inmigrante. La prensa conservadora quiso mostrar sumiso al gobierno mexicano ante los estadounidenses para ofrecerles lo que no pudo Trump: un muro fronterizo, mejor conocido como muro de la ignominia.
En materia de salud también habrá un cambio extraordinario para Tamaulipas con la llegada del doctor, como pasar de la noche a la mañana, ya que se espera la incorporación del estado al INSABI, y esto permitirá solucionar problemas como el desabasto de medicamentos y deficiencias en el servicio médico.
Como principio, los proyectos para ampliar y modernizar los cruces y puentes con Estados Unidos reactivarán la economía de la región y generarán puestos de trabajo. Iniciar con el pie derecho es uno delos mejores augurios para cualquier gobierno.
Si con Francisco García Cabeza de Vaca no fluía la inversión pública federal fue, principalmente, su culpa. Se la jugó con la Alianza Federalista, asesorado por los “genios” de Marko Cortés, Ricardo Anaya y Rigoberto Gil Zuarth. Creyeron que abollarían la aprobación de López Obrador, pero los abollados fueron otros.
