Ante la escasez de agua y el endurecimiento de los cortes en la entidad, el Gobierno de Nuevo León prohibió el uso de agua potable para el riego de jardines y el lavado de automóviles en la entidad.
En un acuerdo publicado en el Periódico Oficial del Estado se establece que esta medida aplica de manera de inmediata y otorgan facultades a la Dirección de Protección Civil estatal para levantar actas de inspección y sanciones por el uso de agua potable para estas dos actividades.
«Queda estrictamente prohibido el uso de agua potable para el riego de jardines, así como para el lavado de automóviles», se detalla en el acuerdo firmado por el Secretario de Gobierno, Javier Navarro.
«Se instruye y faculta al director de Protección Civil para que entre en coordinación con la Secretaría del Medio Ambiente y el organismo Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey…para el efecto de llevar a cabo labores de vigilancia, verificación e inspección sobre el uso permitido del agua potable.
«…Y en su caso, apliquen de manera estricta las sanciones a que se refiere los artículos 58 y 60 de la Ley Agua Potable y Saneamiento del Estado».
Las multas a las personas que utilicen el agua potable para usos no autorizados es de 8 y 10 cuotas, que rondan entre los 770 y 962 pesos.
