Sin Filtros; Por: Brenda Ramos
Después de la euforia y el festejo del virtual ganador a la gubernatura, la adrenalina va bajando y se llega la hora de evaluar a los operadores. Para no saturarle con demasiada información el día de hoy hablaremos de las supuestas mejores operadoras de ambas fuerzas, quienes o traicionaron a sus partidos o simplemente no traen en el morral lo que tanto han presumido.
Yahleel Abdala Carmona perdió nuevamente en Nuevo Laredo a pesar de todo el apoyo y las decenas de denuncias de compra de votos para el panismo y el acoso del poder judicial que el gobernador ha tomado como su brazo golpeador contra el gobierno de Carmen Lilia.
Yahleel se quedó con el trago amargo de la derrota contra Carmen Lilia ocurrido el año pasado, por lo que de consolación le dieron el puesto como la titular del bienestar en el gobierno estatal, sin embargo, no cumplió con lo prometido, de hacer tragar polvo y humillar a némesis; ante esta situación circuló un audio en el cual la ex priista y neonata panista lloraba amargamente la derrota, cosa que no le quedó más remedio negar en todas sus redes sociales. Ya que, a tragarse sus palabras, y ponerse verde de envidia ya que no solo perderá su chamba con la entrada del nuevo gobernador, sino que no tendrá la oportunidad de malgastar el erario en accesorios Cartier, guardarropas exclusivos de París y viajes por todo el mundo como lo hace la alcaldesa CantúRosas.
De una vez nos pasamos con la presidenta municipal que se ocupó más de las listas de espera de las marcas exclusivas para tener los modelos más recientes de bolsa y zapatos, todo por supuesto acorde a sus muy humildes joyas, baratitas nadamas de más de un millón de pesos entre reloj y brazalete que de asegurarle la victoria a Américo Villarreal el día de las votaciones.
En efecto Nuevo Laredo ganó, pero fue por la fuerza y marca de López Obrador, ya que la diferencia de votos fue minúscula entre César Verástegui y Américo Villarreal. Muy lejos de la realidad estuvieron sus cacaraqueos sobre su poderío e influencia en la ciudad, tal vez esa fue la razón por la cual prefirió no asistir al festejo del triunfo del próximo gobernador.
Por lo menos Carmen Lilia tuvo prudencia y vergüenza de no aparecerse inmediatamente en público después de sus bajos resultados, pero la alcaldesa de Díaz Ordaz no tuvo ningún problema en aparecerse en el escenario a pesar de que su municipio perdió vergonzosamente ante el PAN.
Nataly quien antes de llegar a su cargo se desempeñaba como profesora, en esta ocasión salió completamente reprobada. En el distrito 3 de Nuevo Laredo, la sección de Diaz Ordaz abarcó de las secciones 0332 – 0345, tan solo 14 secciones a su cargo y no pudo hacer que MORENA ganara, en la pequeña ciudad. Pero con eso de que ahora la SEP no reprueba, Nataly Diaz apareció quitada de la pena para festejar un triunfo al que no aportó.
Otra que tenían por buena y les dio gato por liebre fue Lety Salazar en Matamoros. La exalcaldesa y el PAN estaban conscientes que no derrotarían al alcalde morenista Mario López, sin embargo, se esperaba una mayor cantidad de votos para abonar a la balanza del resultado final y pudieran hacer contrapeso con otros municipios. Desde la organización de eventos en la época de la campaña, ya se mencionaba la traición y apatía de Lety Salazar, cosa que se hizo realidad el 5 de junio.
Como protagonistas finales se encuentran las tampiqueñas Olga Sosa y Úrsula Salazar Mojica. La primera quien durante toda la precampaña y el inicio de la campaña del candidato aparecía en todos los eventos como porrista, en vez de estar trabajando en las estructuras de Tampico, desapareció abruptamente en la última semana de campaña cuando se dieron a conocer las supuestas conversaciones entre ella y el extinto Sergio Carmona, en las cuales el oportunismo y la traición a los miembros de morena eran muy fuertes.
Todavía no se recuperaba de ese golpe mediático cuando trascendió un comprobante fiscal emitido por el SAT en el que aparecía el nombre de su madre por una transacción de compra/venta por 1.5 millones de dólares. En cuanto a Úrsula, a quien le dieron la oportunidad de liderear la bancada de MORENA en el congreso local, nada pudo hacer en Tampico, su lugar de origen para que su partido venciera a pesar de tanto presumir su sangre azul y lejano parentesco con el presidente Andrés Manuel.
Esto es lo que pasa cuando se miente en el currículum para conseguir un trabajo. Las panistas fueron responsables por hacer perder a su partido y candidato a la gubernatura, además de la oportunidad de luchar por la presidencia en 2024. Las morenistas, estuvieron a punto de hacer perder a un candidato que tenía todo el respaldo de la marca y el partido para ganar, por lo cual sería bueno que repasaran si de verdad las considerarán en los puestos claves para buscar la continuación del proyecto de nación del presidente en el 2024.
