Ante temor, Colegio de Médicos aclara que viruela del mono no se propaga por el aire
TAMPICO, TAM.- Debido al temor que ha generado la viruela del mono, la ciudadanía desconoce cómo se contrae la enfermedad, ante ello el Presidente del Colegio de Médicos Tamaulipas explicó que no se propaga en el viento sino por el contacto físico, erupciones o fluidos corporales como pus o sangre de lesiones en la piel.
El médico Jorge Rosendo Sánchez, aclaró que el cubrebocas no detiene el contagio de esta enfermedad, por lo que su uso puede ser opcional.
“Esta viruela del mono no se propaga por el aire, así que no es necesario el cubrebocas, tampoco por el agua y alimentos, pero si debemos lavarnos las manos frecuentemente, por eso digo que lo del cubrebocas no es tan necesario, los contagios en personas generalmente pueden ser por la ropa, lesiones de la piel, si en la piel tengo una herida por ahí pudiera pasar el virus”.
Reiteró que para prevenir es de suma importancia tomar distancia entre una persona y otra, tal y como se estableció durante la pandemia por Covid-19, así como el constante lavado de manos con jabón.
Rosendo Sánchez, mencionó que este virus no se compara con el Coronavirus, pero es necesario que la gente tome precauciones y ante cualquier síntoma acuda al doctor.
“Personas con defensas bajas son susceptibles de poderse contagiar y tienen más probabilidades de que pueda irles mal, pero no se compara para nada con la pandemia que acabamos de estar pasando y que todavía la padecemos, por lo tanto estaremos vigilando con lo que nos digan las autoridades de salud en el estado”.
La sintomatología a presentar es fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, dolor de espalda, poca energía, ganglios linfáticos inflamados y erupciones o lesiones en la piel.
De acuerdo a la Organización Mundial de la salud, los objetos son focos rojos de contagio:”el contacto con objetos que han estado en contacto con la persona infectada como la ropa, ropa de cama, toallas u objetos como utensilios para comer también pueden representar un foco de infección”.
Por Javier Cortés