TAMPICO, TAM.- Los alumnos del kínder ,Rosaura Zapata , se exponen todos los días al peligro que representa la losa de un salón, que fue partida a la mitad por la caída de un árbol.
Son 88 niños los que acuden a este centro educativo, aunque las maestras han acordonado el área y realizan guardias para que los niños no se acerquen.
“La reparación podría quedar hasta que termine el proceso electoral; sin embargo las clases presenciales se reactivaron en un horario de 8:45 a 12 del mediodía, vienen todos los alumnos”, explicó la maestra y directora plantel Sonia Gudin.
Poco más de 80 niños del jardín de niños Rosaura Zapata de la colonia Primavera del municipio de Tampico, siguen en riesgo latente al estar a punto de caer la losa de un salón de clases.
Los menores caminan constantemente a escasos metros del salón siniestrado para acudir a los sanitarios, además realizan sus actividades como deporte o recreo, exponiéndose a que en cualquier momento caiga el techo.
Fue hace un año, cuando un árbol cayó sobre el salón de clases, luego de un fuerte norte registrado, al encontrarse en pandemia y clases solo virtuales.
Por Mario Prieto
