DÍAZ ORDAZ, Tam.- Tremendo susto se llevaron niños que viajaban en un autobús con sus padres a recibir la vacuna anti COVID-19 a la frontera del estado, cuando el camión en el que viajaban sufrió la ponchadura de los neumáticos, por ponchallantas que arrojó minutos antes un delincuente.
Los hechos se registraron este miércoles, a la altura del ejido Argüelles, cuando un civil armado a bordo de un vehículo, no hizo el alto que le marcaron policías estatales que realizaban rondines de seguridad sobre la carretera.
El hombre aceleró la marcha y comenzó a disparar contra los efectivos de la policía y arrojó artefactos a la carretera, conocidos como ponchallantas, para tratar de evitar la persecución.
En su loca carrera, el sujeto maniobró y salió de la carretera, volcando su auto sobre un canal, donde fue detenido por los policías y luego trasladado a un hospital para recibir atención médica, pues resultó lesionado.
En el interior del vehículo se encontró un arma corta y varias estrellas metálicas conocidas como ponchallantas, quedando estos objetos a disposición del ministerio público.
Alrededor de 15 minutos después de estos hechos, pasó por el lugar un autobús de la línea Transpaís que había salido del municipio de El Mante y se dirigía a la frontera con un grupo de menores de edad y sus padres, para recibir la vacuna contra el covid-19.
Los pasajeros del autobús foráneo, que era custodiada por elementos de la Guardia Nacional y policías estatales, fue resguardada, sin que se reporten personas lesionadas por este incidente.
Por Perla Reséndez
