Ciudad de México.- Antes de ser deportado Juan Gerardo «N», «El Huevo», identificado como líder del Cártel del Noreste, rechazó ratificar la demanda de amparo con la que un juez en la Ciudad de México ordenó frenar su entrega a otro país.
Por ello, el juzgado Quinto de Distrito de Amparo en materia Penal dejó sin efectos la suspensión que le había concedido el pasado 14 de marzo.
De ser hallado culpable de los cargos que se le imputan, el líder del Cártel del Noreste, Juan Gerardo «N», alias «El Huevo», podría ser condenado a cadena perpetua en los Estados Unidos, país al que fue deportado luego de ser detenido el domingo en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
El Departamento de Justicia de los Estados Unidos acusa a Juan Gerardo «N» de 11 cargos relacionados con el tráfico de drogas, armas y de lavado de dinero, por los que podría enfrentar cadena perpetua por cada uno de los cargos que le imputan.
Mediante un comunicado, el Departamento de Justicia agradeció al gobierno de México «por su ayuda» en la captura y deportación de Juan Gerardo «N», a quien consideró un narcotraficante que fue sicario, jefe de plaza y después líder del Cártel del Noreste, grupo criminal surgido de Los Zetas.
ARMADO EXIGÍA ACTA DE SU HIJO
El padre de Juan Gerardo Treviño Chávez, El Huevo, irrumpió en el registro civil de Linares, Tamaulipas, para exigir que le expidieran un acta de nacimiento de su hijo.
El hombre llegó a la Oficialía primera de Registro Civil en Nuevo Laredo acompañado de una mujer que se identificó como su abogada y exigió la copia del acta de nacimiento de Treviño Chávez, sin embargo, esta no pudo ser expedida dado que el registro «fue dado de baja en 13 de noviembre de 2020, mediante acuerdo administrativo expedido por la Coordinación General de Registro Civil del Gobierno de Tamaulipas, en razón a que la generación del mismo fue realizada mediante el uso de datos falsos».
El personal de la oficina del Registro Civil informó de esta situación al padre del presunto líder del Cartel del Noreste, por lo que se retiró del lugar, sin embargo, el hombre regresó poco después acompañado de «civiles armados, quienes amedrentaron y exigieron les fuera entregada el acta de nacimiento».
