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EU aplica más sanciones a Norcorea tras pruebas de misiles

Con las sanciones se bloquea el acceso a cualquier activo estadounidense en manos de estas empresas, así como al director de Apollon, Aleksandr Andreyevich Gayevoy, y al director de Zeel-M, Aleksandr Aleksandrovich Chasovnikov, que también controla RK Briz.

Por otro lado, el Ministerio de Defensa surcoreano indicó que detectó señales de que Corea del Norte podría estar restaurando algunos de los túneles de su campo de pruebas nucleares que fueron detonados en mayo de 2018, unas semanas antes de la primera cumbre entre el líder Kim Jong Un y el entonces presidente estadounidense Donald Trump. El ministerio no dijo si cree que el gobierno norcoreano estaría restaurando el sitio para reanudar las pruebas de explosivos nucleares.

Los vecinos de Corea del Norte detectaron dos lanzamientos balísticos la semana pasada. Más tarde, Pyongyang dijo que estaba probando cámaras y otros sistemas que se instalarían en un satélite espía, pero no reveló qué misiles o cohetes utilizó.

Tras analizar los lanzamientos, los ejércitos de Washington y Seúl concluyeron que se trató de un misil balístico intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés) en desarrollo que fue presentado en un desfile militar en octubre de 2020.

«El propósito de estas pruebas, que no demostraron el alcance del ICBM, posiblemente fue evaluar este nuevo sistema antes de realizar una prueba a alcance completo en el futuro, potencialmente disfrazada como un lanzamiento espacial», dijo el secretario de prensa del Pentágono, John Kirby, en un comunicado el jueves.

Corea del Sur realizó una evaluación similar y dijo que Pyongyang debe detener de inmediato cualquier acto que eleve las tensiones y las preocupaciones regionales de seguridad.

El misil citado en ambos reportes es el Hwasong-17, el más grande del arsenal norcoreano, que en potencia podría recorrer hasta 15.000 kilómetros (9.320 millas), un alcance suficiente para atacar cualquier parte del territorio estadounidense, y más allá. El proyectil, de 25 metros (82 pies) de largo, fue mostrado de nuevo en una exhibición de defensa el año pasado en la capital, pero aún no ha sido probado.

Corea del Norte ya ha demostrado su potencial para alcanzar el territorio estadounidense con pruebas de vuelo de otros misiles balísticos intercontinentales, el Hwasong-14 y el Hwasong-15, en 2017. Según algunos analistas, el desarrollo de un misil más grande podría significar que el país está tratando de armar su armamento de largo alcance con varias ojivas para superar los sistemas de defensa antimisiles.

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