Sin Filtros; Por Brenda Ramos
Desde el mes de Noviembre del año pasado se daban a conocer los enfrentamientos entre la prensa y el Alcalde Morenista de Altamira Armando Martínez; la inexperiencia y mal manejo de la jefa de prensa Cynthia “La Comaye”, pusieron al edil en la penosa situación de llamar Chantajista al medio de comunicación Grupo Milenio Tamaulipas, en una sesión de su acostumbrada mañanera.
Desconocemos quien le vendería la idea de copiar al presidente Andrés Manuel López Obrador con la costumbre de invitar a medios de comunicación para dar lo avances de su Gobierno, pero ni es el presidente, ni su equipo es el del líder del ejecutivo nacional y deben entenderlo. A la mañanera constantemente acuden ciudadanos con peticiones y reclamos al presidente municipal que son acallados por su staff e ignorados por Armando Manriquez.
Cynthia Jaime quien fuera recomendada por el diputado Erasmo González para ser la jefa de prensa de Martinez Manríquez, ya ha demostrado su poca tolerancia y falta de capacidad para resolver problemas; si no se aguantan no se alquilen, pues hasta a los ciudadanos se llevan de encuentro, y sino basta preguntarle a la señora Consuelo Torres, quien desde la colonia Altamira fue a “la mañanera” para pedirle empleo al alcalde, ya que como madre de familia tiene muchos gastos que cubrir.
Sin embargo como la ama de casa no apoyo en campaña ni simpatiza con MORENA o algún otro partido político, lo único que recibió de parte de Armando Martinez fue un saludo y la tajante y parca explicación de que no se podía pues la administración anterior dejó la nómina inflada.
Este asunto no le causo ninguna gracia a Liliana García, la secretaria particular, pues en su mundo de caramelo, creen que los micrófonos y cámaras de los medios de comunicación son de su propiedad por cualquier convenio que puedan llegar a tener con ellos; asi que molesta mando llamar a la jefa de prensa para que rescatara al alcalde de las peticiones de la señora Consuelo.
Después de no uno, sino muchos incidentes parecidos, se mandó correr el rumor de que el Alcalde le puso las cartas sobre la mesa a Cynthia para que se tomara unas pastillas de ubicatex, pues el trato con la prensa y con los ciudadanos no era el indicado; la llamada de atención fue por el mes de diciembre, cuando se supone que todo es paz y buenos deseos, pero por lo visto, solo fue un rumor, ya que Cynthia sigue haciendo de las suyas.
Pero no es culpa del indio, sino del que lo hace compadre, pues el descontento entre los compañeros del gremio periodístico en Altamira continúa, pues si algo no le parece a la señorita Cynthia, los transfiere con alguna otra persona para seguir tratando cualquier tema, olvidando que su trabajo es brindar la información sobre el trabajo del ayuntamiento y siendo el enlace entre la prensa y el edil.
Con la campaña por la gubernatura encima y la guerra sucia a todo lo que da por parte del PAN a la imagen de Armando Martínez con el tema de los Carmona, Cynthia está resultando ser el eslabón más débil en Altamira, lo que puede costarle la gubernatura a Américo Villarreal, ya que el trato con la prensa a nivel nacional se está complicando con la muerte de ya 6 periodistas en lo que va del año, por lo cual sugerimos al equipo de prensa de Altamira, tomar sus pastillas de ubicatex como lo recomendó el alcalde. Nosotros también nos tomaremos una dosis, no nos vayamos a encontrar a Cynthia o a otro servidor público desubicado y la cordura se tenga que apoderar de nosotros, puesto que claramente ellos, no llegaron para servir, sino para servirse.
