Juegos de alianzas en Tampico y Altamira
Ciudad Victoria. – En tiempos electorales es común ver reencuentros entre personas que habían dejado de tratarse por razones de trabajo o de fuerza mayor. Pero cuando dos políticos, que hace tiempo no se frecuentan, se sientan ante una mesa de café, no existe ninguna casualidad ni chiripada. No, señor.
Tal es el caso de CHUCHO NADER NASRRALLAH, el alcalde de Tampico, y JUVENAL HERNÁNDEZ LLANOS, el ex alcalde de Altamira y esposo de Alma Laura Amparán, la pasada presidenta de ese municipio y perdedora de la elección de 2021.
Ambos personajes se reunieron el martes 8 de febrero en un café ubicado en los límites de Tampico y Altamira. Claro, era más que una charla entre cuates, pues se habló de política; JUVENAL estaba ahí como delegado de la alianza ‘Va por Tamaulipas’. Según información que circuló, el propósito de la reunión era reafirmar “la unidad en torno a las diferentes fuerzas políticas que avalan el proyecto de César Verástegui”.
Si hay alguien en Tamaulipas que públicamente ha manifestado su apoyo al Truco, y que le ha organizado una de las mejores veladas con panistas, ese es CHUCHO NADER. Luego, JUVENAL no necesita convencerlo de nada ni pedirle refrendo alguno. Aunque siempre sea deseable reunir a líderes de grupos diferentes, y sellar alianzas para enfrentar la competencia, está noticia tuvo más resonancia de la que merecía y aportó pocas cosas en sí al proyecto del ingeniero Verástegui por lo que explicamos anteriormente.
La buena noticia, que la gente no alcanza a percibir, es que ya se levantó el castigo a JUVENAL después de rebelarse a los zares del PAN en Tamaulipas en las elecciones intermedias de 2019. JUVE estaba montado en su macho de imponer a su hija como candidata a diputada local y así entregar el municipio a toda su familia, con la señora a Amparan, su esposa, como alcaldesa.
Los planes de JUVENAL chocaron con los de ISMAEL GARCÍA CABEZA DE VACA, verdadero capataz dentro del PAN, quién por medio de su particular, el insoportable chilango Álvaro Niño, quitaba y ponía candidatos a su capricho. Después de aquella elección, mandaron a la banca a JUVE, pero todo indica que el TRUCO lo rescató y ya está volcado por entero a la campaña de Acción Nacional, principalmente.
Ya que estamos en Tampico, consideramos un acierto de CHUCHO NADER posponer en Carnaval 2022 en vez de cancelarlo. Se ajustará la fecha a un periodo de baja incidencia de contagios por Covid para proteger así a las familias. Altamira, en cambio, no tendrá celebración en este año.
En Ciudad Madero, ADRIÁN OSEGUERA KERNION sigue con mucha atención los acontecimientos políticos. Él también ya se definió, y ha empeñado su apoyo a Morena para la elección de gobernador. Pero, es un hombre con los pies en la tierra, un observador de la realidad, y sabe que en política no hay certezas de nada. Por eso cuida diariamente su cargo, atiende a los ciudadanos y proyecta soluciones a futuro para su municipio. El 2024 ya parece decidido, pero aún quedan muchas citas por delante, y hay que estar preparado para las oportunidades.
Mientras eso ocurre, en Madero están atentos a la embestida que el Gobierno del Estado quiere preparar ahora con la intervención de las corporaciones de Tránsito en Nuevo Laredo y Victoria. Es la misma estrategia que intentaron en la urbe petrolera, pero acá supieron defenderse y ampararse contra la violación a la autonomía municipal. Esperemos que lo solucionen satisfactoriamente por la vía jurídica e impidan las injerencias ilegales de Cabeza de Vaca en municipios gobernados por Morena.
En Altamira, ARMANDO MARTÍNEZ MANRÍQUEZ ha intensificado la ayuda a las escuelas de los educación básica al acercarse el momento de regresar a clases presenciales. Sin embargo, las necesidades son demasiadas, y se requiere el esfuerzo de todos, de padres, alumnos y maestros, incluso de empresarios, para poner en condiciones a los planteles. El primer responsable debería ser el Gobierno de Tamaulipas, pero vaya usted a saber qué pasa por la cabeza del gobernador, angustiado por su situación legal y por el último día de su mandato, cada vez más cercano.
En Altamira también andan desatadas las tribus de Morena y buscan acomodo por la fuerza, algunos aunque no representen nada ni hayan colaborado en la campaña de 2021. Son las gentes que se acercaron a hablar con Erasmo y con Ernesto Palacios, el delegado nacional, para negociar posiciones, pero se quedaron con las manos vacías.
Ahora se la quieren cobrar al profesor ARMANDO MARTÍNEZ, cuando él no participó en esas charlas, y solo causan conflictos y animadversión. Por fortuna, el alcalde mantiene la calma y no se enfrenta con nadie.
Así de mal dejaron las cosas en el sur de Tamaulipas los carmonistas de Erasmo González y compañía.
