Las Vegas, EU/Redacción:
El trabajador de una gasolinera en Las Vegas, Nevada, se suicidó luego de dispararle a un cliente que se negó a colocarse un cubrebocas.
De acuerdo con las autoridades, de haber sobrevivido el trabajador, se habría enfrentado a severos cargos penales en su contra.
Así mismo, se detalló que el cajero de 36 años fue declarado muerto en el lugar, debido a una herida de bala autoinfligida en la cabeza.
En el reporte policial se determinó que “el hombre hombre entró sin cubrebocas e inició una pelea con el empleado, que le gritó al cliente que se pusiera un cubrebocas o saliera de la tienda, pero él se negó y puso tres bolsas de papas fritas en el mostrador. El empleado molesto por la actitud del hombre se negó a atenderlo y el cliente salió del establecimiento sin pagar”.
El empleado lo siguió y lo comenzó a grabar con su celular, lo que provocó que el cliente se molestara y avanzara hacia el empleado y “se produjera una lucha”.
No obstante, una vez que se acabó la pelea física, el empleado sacó una pistola de su bolsillo y la accionó en tres ocasiones contra el cliente, hiriéndolo en el hombro.
Por ello, la víctima corrió a una tienda de neumáticos, donde fue recogido por su ex novia, quien pasó por él en una camioneta.
Por su parte, el empleado llamó por celular y comenzó a discutir con alguien en la línea, mientras que momentos después se apuntó a sí mismo y se disparó al lado derecho de su cabeza.
Cuando la Policía de Nevada llegó a la escena vio que el hombre aún sostenía su pistola en la mano y el teléfono celular en la otra, además de encontrarse boca arriba, sin pulso y sangre saliendo por su cabeza.
Finalmente, los detectives recuperaron la pistola Glock utilizada en ambos tiroteos y cuatro casquillos, y revisaron el video de vigilancia antes de presentar el informe el 9 de febrero que detalla la cadena de eventos.
