SIN FILTROS; POR BRENDA RAMOS.
Con la visita de AMLO a Nuevo Laredo se fortalece la corriente lopezobradorista, pues este municipio ha sido uno de los costales de pelea que el gobernador de Tamaulipas ha elegido para golpear una y otra vez con toda la fuerza política del estado.
La presencia del presidente en nuestro estado puede ser el empujón que se necesita en la Suprema corte de Justicia para que se resuelva el caso de Cabeza de Vaca, quien hasta el momento se encuentra sin fuero, pero los oídos sordos del Máximo Tribunal Constitucional del País y cabeza del Poder Judicial de la Federación, han retrasado el momento en el que el líder del ejecutivo haga frente a las 5 denuncias que presentó la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) en su contra.
Es extremadamente importante que esta situación se resuelva lo antes posible, pues la impunidad que ronda en este caso se ha convertido en una burla para los tamaulipecos, sobre todo porque los mismos representantes del presidente en nuestro estado han sido omisos al respecto y es el momento que el presidente se de cuenta que las lealtades en Tamaulipas a su movimiento se han descarrilado por motivos personales que no suenan lógico, pero sí metálico.
Se suponía que la bancada de Diputados de Morena a quien la ciudadanía eligió representantes en El Congreso del Estado de Tamaulipas, dándoles el poder de tener la mayoría y la presidencia de la JUCOPO se ocuparían del asunto, en lugar de eso resultaron inexpertos, berrinchudos y faltistas que van a calentar el curul solamente quienes convenientemente y después de meses, al sentir pasos en la azotea con la visita del presidente, subieron a tribuna con golpes de pecho y rasgándose vestiduras vociferando en contra del gobernador.
En cuanto a su experimentado líder Armando Zertuche, a este se le ve más ocupado en enfrentamientos de poder por ego personal y gritos con la autoritaria diputada Imelda San Miguel (Quien está a punto de enfrentar un juicio político en su contra, a petición del regidor de Nuevo Laredo Jorge Valdez Vargas) y en supervisar de cerca las actividades del joven personal femenino del congreso del estado, que en buscar que Cabeza de Vaca enfrente la justicia.
No cabe duda que se necesita la presencia del presidente en el Estado, pues ni siquiera el Doctor Américo Villarreal mientras estaba en el Senado luchó por justicia para Tamaulipas, ni en el Caso Cabeza de Vaca, ni en seguridad y mucho menos en salud, y ahora como precandidato cobijado por la fuerza del CEN de MORENA tampoco ha tenido el valor o las ganas de hacerlo.
Y que decir del escandalo del presunto huachicolero Sergio Carmona, en el cual esta involucrado incluso el presidente de MORENA Mario Delgado, siendo Erasmo González el responsable de haber introducido al fallecido al partido y a partir de ese momento los vehículos propiedad de los Carmona Angulo fueron utilizados por políticos morenistas, Mario Delgado, Erasmo González y Américo Villarreal habrían viajado en los aviones privados del “Empresario”, incluso consiguió que Julión Alvarez viniera al cierre de Campaña de Olga Sosa y Armando Martínez en la Zona Conurbada.
Veremos si después de esta visita, Erasmo, Olga, Armando Martínez Manríquez y José Ramón Gómez Leal, siguen manchando con su presencia los actos de la campaña por la gubernatura, eso dependerá de la obediencia que tenga Américo al presidente y el agradecimiento por ser el elegido para la candidatura.
Terminamos este texto pensando en lo lejos del rumbo de la 4T se encuentra MORENA en Tamaulipas, el movimiento se llenó de priistas, traidores, omisos, tibios y tribus caníbales; se manchó de huachicol y corrupción, se violó la voluntad de los militantes y los principios de no mentir, no robar y no traicionar quedaron en el olvido, se fueron en los vehículos y los aviones privados de los Carmona Angulo. Hacía falta esta visita, hacía falta AMLO, porque cuando el gato no está los ratones hacen fiesta.
