Amarrar navajas.
Desafortunadamente los tiempos electorales que estamos viviendo son propicios para el nacimiento, crecimiento, desarrollo y consolidación de un viejo oficio humano: amarrar navajas entre adversarios. En efecto se trata de irritar, provocar y amenazar a los contrarios para que reaccionen negativamente entre ellos y se hagan pedazos, expresado políticamente.
Como en las peleas de gallos; se trata de un antiquísimo oficio que consiste en hilar suavemente las navajas metálicas en los espolones del gallo, metal que provocará heridas mortales en sus rivales momentáneos. Navaja bien amarrada y afilada por su gallero es un punto a favor del gallo afortunado.
Pues así estamos hoy; en redes sociales o en los medios de comunicación convencionales sobramos galleros, profesionales y amateurs, que intentamos amarrar navajas: exageramos «cambios de camiseta» de militantes de un partido político que emigra al partido de enfrente, exageramos en los liderazgos que abominan o engrandecen a sus adversarios partidistas y en fin magnificamos o minimizamos eventos o personalidades sin mucha fundamentación, objetividad o conocimiento de los sucesos o políticos en cita.
Así estamos hoy y así hemos sido desde ayer; la clase política lo sabe pero quizá el ciudadano en lo general se sorprenda del radicalismo de muchos colegas que se expresan por un lado como si odiaran al personaje en cita y a los otros como si amaran con locura a su personaje preferido.
Cuando sólo se trata de un trabajo eventual, que después de la jornada electoral constitucional (para nuestro caso después del primer domingo de junio entrante), las críticas a las personas y a los partidos políticos se irán al cajón del olvido y los amores se enterrarán para siempre: es lo voluble y frívolo de nuestro sistema político-electoral mexicano.
Así pues concluimos que quizá no sea muy rentable amarrar navajas entre gitanos; al político profesional le escurre por el lomo la crítica (fundada o no, eso es secundario), como al crítico profesional le falla la memoria después de la jornada electoral respectiva.
Pareciera que sólo en las peleas de gallos verdaderas sigue siendo rentable el oficio de «amarra navajas»; en nuestro medio es un oficio en proceso de extinción; claro como siempre…salvo su mejor opinión.
Cd. Victoria Tamaulipas. Jueves 3 de Enero de 2022. Evaristo Benítez Castro en Faena en Canal.