Ciudad de México/Redacción:
Este 16 de febrero se aprobó por unanimidad por parte de la Comisión de Atención al Desarrollo de la Niñez en el Congreso de la Ciudad de México el dictamen por el que se prohíbe a los padres de familia o tutores utilizar castigos corporales o físicos, así como tampoco humillantes en contra de menores de edad, como una medida disciplinaria.
Así mismo, los diputados locales indicaron que con la aprobación, ahora los niños no podrán recibir golpes con la mano o algún objeto, ni tampoco empujones, pellizcos, mordidas, tirones de cabello o de oreja, ni ser obligados a sostener posturas incómodas, entre otras reprimendas.
El dictamen dado a conocer sostenía que “desde la perspectiva del interés superior de la niñez, resulta imperante la implementación de acciones contundentes, que permitan revertir la normalización y tolerancia histórica de los castigos físicos o humillantes, que representan prácticas nocivas de crianza”.
Por otra parte, los legisladores capitalinos establecieron que esta prohibición no tiene como fin primario la penalización de las conductas de madres, padres o tutores, “sino que pretende visibilizar que estas prácticas atentan contra la integridad y dignidad de los niños y adolescentes”.
No obstante, las autoridades deberán prevenir, investigar y sancionar los casos en que niñas, niños y adolescentes se vean afectados por el castigo corporal y humillante.
Finalmente, el DIF también deberá hacer los suyo, pues deberá difundir medidas alternativas de disciplina que sean participativas, positivas y no violentas.
