VICTORIA, TAM.- Y cuando se cerraron las aulas, el espíritu de servicio del docente salvó el ciclo escolar. Y lo volverán a hacer.
Maestras y maestros son las otras heroínas y héroes de la pandemia.
En una tarea titánica, que aún no termina, muchas mentoras y mentores hicieron compatibles sus habilidades pedagógicas con las tecnologías de la información, se apropiaron de los espacios virtuales y no interrumpieron la comunicación con sus educandos.
Es el caso de la maestra Mirtha Idalia Niño Lerma, directora de una Unidad de Servicio de Educación Regular, que es una instancia operativa de la Educación Especial, para brindar orientación, asesoría y acompañamiento a maestros y padres de familia, en un sistema educativo inclusivo, y en entrevista para La Infiltrada del Grupo Editorial Expreso_La Razón, nos cuenta la experiencia docente que trasciende las pantallas para tocar las emociones de sus alumnos.
Al primer anuncio del “Quédate en Casa” hace dos años en el inicio de la pandemia por Covid 19, madres de familia debieron improvisar salones de clase en la sala, comedor o cuarto de los niños para que ellos atendieran sus estudios en línea. Sin embargo, el mayor reto ha sido para la clase docente, profesores que debieron emprender reformas en sus hogares para adecuar espacios, colocar pizarrones, conectar internet y salir a dar la materia frente a una pantalla.
“Desde que estamos en casa trabajado, hemos dividimos nuestro tiempo y nuestro roles para poder rescatar el trabajo que hacemos con nuestra familia y al mismo tiempo aterrizar la intervención virtual con nuestra comunidad escolar, con nuestros alumnos, padres de familia y demás compañeros” cuenta la maestra Mirtha.
“Dividir la función que realizó como una mujer trabajadora y como madre de familia desde mi casa, ha sido el mayor de los retos”.
A contra reloj, con el calendario escolar en mano, los pedagogos comenzaron a fundamentar nuevas estrategias para hacer frente a la crisis sanitaria que derivaría en una crisis educativa, que deja ya rezago en la materia. No solo se trataba entenderse con las nuevas herramientas tecnológicas sino de mantener y fortalecer el lazo emocional del educador con el educando.
Y en esa labor, se debe tomar en cuenta que no todos los alumnos tienen acceso a la educación en línea, por ello nace el proyecto “Clases en tu Hogar Radio” de los maestros tamaulipecos Gloribella Guerrero, María de Lourdes Pacheco, Juan Carlos Jiménez, María Luisa Quintana, Maribel Rodríguez y Mirtha Niño, un programa que recibió el premio nacional ABC 2021 en la categoría Ser Comunidad.
La producción radial, guiones y locución estuvo a cargo de los propios docentes que privilegiaron la comunicación verbal emotiva para llegar a los rincones más apartados de la geografía tamaulipeca con clases de matemáticas o educación física, que también involucraron a los padres de familia oyentes.
“En el momento que se cerró la escuela, que se quedó en silencio, buscamos de qué manera llegar a nuestros alumnos más vulnerables, llegar hacia las zonas rurales y a los niños con discapacidad, y teníamos que llegar a los oídos de las familias que más no necesitaban, a niños que no tenían acceso a la tecnología, además de que desconocíamos como se iba a trabajar desde los hogares”, recuerda la maestra de educación especial, capacitada en gestión e intervención educativa.
A parte del programa oficial del “Aprende en Casa” implementado por la SEP, la comunidad escolar desarrollo proyectos propios para dar continuidad al ciclo y “En definitiva que hay un rezago educativo, debemos fortalecer el aprendizaje, con herramientas como la radio, la tecnología y las herramientas que tenga a la mano el estudiante”
LOS NIÑOS EN CASA ESTAN AISLADOS, SOLOS Y CON MIEDO
Ante la incertidumbre que siembra la extendida pandemia, la comunidad docente anhela regresar a los espacios físicos, a su infraestructura escolar que es escenario de la socialización primaria, ahí maestros y alumnos fortalecen la formación integral del individuo, más allá de la impartición del conocimiento, es el contacto humano lo que se extraña.
Otra problemática que se enfrenta en la educación en línea es la atención a alumnos con discapacidad, la educación especial precisa de métodos de acercamiento con madres de familia y sus hijos, asistencia individualizada, apoyos psicológicos y espacios inclusivos.
En la experiencia de la maestra Mirtha, durante este período se han tenido que hacer intervenciones virtuales, con maestros, psicólogos y familia del educando, pero también asistirles de manera presencial para “ver la sonrisa del niño o joven, que es algo mágico especial, ya tuvimos simulacros, para acompañar al alumno que es el principal actor con discapacidad, a los jóvenes que están alrededor y a los demás docentes”.
“Hay mucho que hacer en la escuela, los maestros deben fortalecer la clase con alternativas que den seguridad a los jóvenes, para que puedan entender lo que se les ofrece en esos momentos, llevar nuevos materiales, con tanta diversidad, hay muchos jóvenes que están ausentes, tienen miedo, y eso nos preocupa y debemos fortalecer lo que sigue, ahorita estamos en proceso para ir a los espacios, plazas o lugares cercanos a los estudiantes para resaltar su seguridad, para que cuando vuelvan a la escuela se sientan más cómodos” explica.
También nos narra las historias de compañeros que van entre la sierra para llevar libros y materiales a sus alumnos, enfrentando todas las barreras, cumpliendo más horarios y con recursos propios van acercado el conocimiento a todos los hogares.
Y cuando nos volvamos a reunir en el aula “Vamos a fortalecer las emociones, la seguridad y rescatar el aprendizaje contextual dónde ellos están, llevar a cabo estrategias sencillas, actividades de recuperación, porque debemos hacer ajustes”.
Para enfrentar la nueva normalidad, la maestra recomienda a las madres y padres de familia que forman un rol importante, que tengan más contacto con el maestro, “sé que están desesperadas, pero debemos tener paciencia y acompañar a los hijos, los invito para que los acompañen de alguna manera y desarrollen actividades juntos, hay algunas que dicen no saben o no pueden, pero superar limitaciones y estar cerca de ellos, que no los dejan solos, que nos acompañen, porque los niños están llegando bien alterados, hay niños que no toleran el acercamiento y eso indica que están solos en la casa.
