ALTAMIRA, Tamaulipas.- Con un impresionante espectáculo de luces pirotécnicas, el gobierno de Altamira que preside el alcalde Armando Martínez Manriquez dio la bienvenida al 2022.
Fue en la explanada del Parque Champayán donde se realizó este evento donde además se procedió al encendido de la iluminación de “Isla de la esperanza” sitio en el cual se proyecta desarrollar como un sitio turístico.
El evento fue encabezado por la primera autoridad del municipio Armando Martínez Manríquez y estuvo amenizado por el dueto de cuerdas DEUX, del maestro Gustavo Rueda, y como parte del programa, el munícipe y su esposa, la señora Rossy Luque de Martínez, presidenta del Sistema DIF de Altamira se dirigieron a las familias ahí reunidas para brindar los buenos deseos para el año venidero.
“Que este 2022 se cumplan todos sus anhelos y sus metas. Hoy más que nunca me encuentro agradecido con Dios por permitirme estar en esta posición en la que tenemos la gran bendición de ayudar, de poner nuestro granito de arena en esta sociedad altamirense”, expresó Martínez Manríquez.
Posterior a su mensaje, junto con su esposa prosiguieron a sellar un candado que simbolizó el cierre del año viejo, siguiendo de este acto la estelar inauguración de la iluminación de un destacado punto de atractivo turístico en la ciudad: La Isla de la Esperanza, misma que se rehabilitó al inicio de esta administración para detonar el desarrollo económico del municipio.
Al conteo de cuatro, se encendieron en referido lugar imponentes luminarias que dotaban de realce este paseo turístico de la laguna del Champayán, para culminar con el espectáculo de luces pirotécnicas que enmarcó esta noche inolvidable para las familias de Altamira.
“Con esto, cerramos un ciclo y damos luz a un nuevo año donde la esperanza y la transformación de Altamira será la oportunidad del cambio anhelado por todas nuestras familias”, finalizó el edil.
En este evento, acompañaron al presidente municipal, su padre, el ex alcalde de Altamira, Armando Martínez Saucedo; su madre, Ma. Elena Manríquez Álvarez; sus hijos y demás familiares; así como la diputada local, Nayeli Lara Monroy; el gerente general de la COMAPA Altamira, Ing. Omar Hernández Leines, y de igual manera síndicos, regidores y funcionarios municipales.
De esta manera el gobierno de Altamira cerró el año, del inicio de la transformación en la urbe industrial.
