La Comuna
Huele a año nuevo y a nuevo régimen
José Ángel Solorio Martínez
El mes de diciembre, será el mes de Rodolfo González Valderrama. Repuntó en las encuestas internas de MORENA -se colocó en un destacado, para él, y saludable empate técnico con el Senador, Américo Villarreal Anaya-; se encontró -por mandato del gobierno federal- con alcaldes de la frontera en una mesa para analizar y discutir las estrategias de seguridad en la región y cerrará con la recepción del Presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador en Matamoros Tamaulipas.
Es evidente que la solución para Tamaulipas no se ha dado, por mucho que algunos ansiosos colaboradores de todos los precandidatos, auguren como hecho esa posibilidad.
Un indicio de que todos juegan en el cubilete morenista, es que sigue la actividad -ya sea en redes sociales, ya sea en territorio- de los siete finalistas.
La sorpresa, ha sido González Valderrama.
Con apenas año y medio de activar con el objetivo puesto en la candidatura -otros, tienen más tiempo- despegó en las preferencias ciudadanas con grandes expectativas. De un modesto 5 por ciento de simpatías -hace seis meses-, saltó a mas del 35 al concluir la primera semana de este navideño mes.
Las muestras demoscópicas, registran que a partir de noviembre -fecha en que tomó protesta como Súper Delegado de la IV T en Tamaulipas, en sólo unos días, repuntó más de 10 puntos lo que le valió ser el líder en asuntos de consensos sociales en la entidad.
Se prevé que al finalizar el año, acumule otros 5 puntos de simpatías.
Uno de los elementos que abrieron la posibilidad para el crecimiento del tampiqueño, es su corto margen de negativos. Hasta el momento, en ese sentido, -es lo que afirman los estudiosos de las campañas electorales- es uno de los precandidatos que mayor potencial de crecimiento puede mostrar en la campaña constitucional.
Es decir: ese elemento, no sólo lo fortalece en la pugna intestina con sus compañeros de partido, sino que lo catapulta como uno de los mejores candidatos para ir a la contienda constitucional.
Las mediciones que han realizado algunos encuestólogos de MORENA, también ponen a González Valderrama, como el precandidato que menos elementos cuestionables tiene en el todo de los precandidatos -es decir: de todos los aspirantes, de la totalidad de las organizaciones políticas- que arrastra menos dígitos negativos.
Se ha visto: Andrés Manuel López Obrador, no juega al tapado.
En el turbulento escenario tamaulipeco, es evidente que el Presidente, desde hace meses tiene candidato.
Sólo se deben leer bien las señales.
Ya huele, a año nuevo y a nuevo régimen.