El mundo politiquero amaneció muy bravo a pesar de que es lunes. Estos días de descanso nos sirvieron para recargar pilas y regresar más claridosos que nunca.
Me doy cuenta de que traemos de novedad al Senador Américo Villarreal. Obvio, es la nota, pero eso no significa que las opiniones desfavorables a su persona sean incorrectas, por el contrario, son extremadamente acertadas.
Por lo pronto me uno a la ola de opiniones de AVA, compartiré con ustedes una anécdota con él doctor Villarreal, un análisis del panorama actual y por la época, una reflexión. Sírvase un café, y disfrute la lectura.
Mi encuentro con él senador Américo Villarreal fue rápido y a la fuerza, pues la mayoría sabemos el temor inexplicable que tiene el Doctor a la prensa, sobre todo cuando se topa con comunicadores críticos y preguntones como una servidora. Es como si para todo necesitara tener un discurso con todas las respuestas, no le gusta que nada lo saque de su zona de confort, pero al ser el candidato por MORENA va a tener que acostumbrarse y aprender a enfrentarse a ese miedo.
Les cuento además que, en dicho evento, que no lleno ni aunque dieron tortas y jugos, los asistentes no sabían a lo que iban, ya que se supone que era un evento para las personas de la zona maquiladora, pero se les dijo que iban a apoyar al candidato a gobernador, eso a mi nadie me lo cuenta, yo lo escuche de la boca de un asistente que me preguntó si era el evento del candidato.
Después de mas de una hora de esperar, y con las pancitas llenas de los asistentes, llegaron los senadores, como si no fueran merecedores del suelo que pisaban, José Narro Céspedes y Américo Villarreal se veían aburridos, dieron unos discursos escuetos y sin chiste y cuando me levanté a querer hacer una pregunta, pelaron gallo corriendo.
No imaginé que tendría que perseguir para que me respondieran las preguntas, pero he de confesar que eso le dio un toque de emoción y adrenalina al momento, ya que muchos éramos los que en ese entonces queríamos saber por qué no había agarrado a la Vaca por los Cuernos, en el tema de la desaparición de poderes de Tamaulipas, siendo que su homóloga la Senadora Guadalupe Covarrubias, se le fue con todo al Gobernador Cabeza de Vaca.
Las preguntas en relación con ese tema eran muy incómodas para el senador, que contesto con una expresión de molestia, sorpresa, nerviosismo, pero eso sí, con un tono de voz calmado. Contestó lo que quiso, y lo hizo parca y escuetamente, pues ¿Qué podía decir ante su muestra de tibieza y falta de valor por defender al estado que pretende gobernar y que lo vio nacer.? Lo que sí voy a reconocer es que no fue rudo o grosero, pues, aunque no le gustaba, entendía que el equipo de sentido común nos encontrábamos ahí para hacer nuestro trabajo, preguntar, preguntar y preguntar, a su vez, nosotros en ningún momento faltamos al respeto a Villarreal.
Leí una vez un comentario muy acertado, si no les gusta que les pisen los pies, pues no se metan a bailar, y es que hasta se veía gracioso como corría el Senador Narro, para que nuestra cámara no lo alcanzara, y prefirió abandonar a su amigo a su suerte con tal de que las preguntas incómodas no lo alcanzaran.
Es entendible (Pero no justificable), que Villarreal Anaya no quisiera cometer ningún error ante la prensa para lograr ser candidato, bueno, ya lo logró, pero si quiere ganar se debe cambiar el chip, su lejanía con la prensa y con la gente, por temor a que le pregunten de su pasado, de su presente o de su futuro lo hace un rival muy fácil para cualquiera de los aspirantes del PAN que quede como candidato, a ellos se les escurren las preguntas y los señalamientos, ellos van por todo, van a ganar, lo hacen sin pudor ni vergüenza, y si el senador sigue con esa actitud, será un bocado que devorarán de una mordida.
AVA es un candidato sin carisma, sin cercanía, sin chiste, y para acabarla de amolar, se ha montado en una actitud de soberbia y arrogancia. En vez de aplicar el lema de su padre Américo Villarreal Guerra “VOLUNTAD Y TRABAJO”, y ser un buen líder que unifique, incluya y aliente, no hace ni una ni otra, pues manda a sus operadores a atacar a los aspirantes que no quedaron seleccionados. Esto para evitar la fatiga de trabajar, para evitar compromisos que prefiere dar a sus amigos priistas y carmonistas, y por revanchismo político, porque las Sábanas de seda tejidas con hilos de oro que formaron la carrera de Américo le impiden aceptar que alguien sea su competencia, que alguien sea mejor que Él, le impiden pedir ayuda.
La gente del campo que se crio con trabajo duro les dice pelados haraganes, yo prefiero llamar la situación como falta de liderazgo. Por lo pronto en el estado de Durango, el senador José Ramón Enriquez, inconforme con la selección de la candidata de su estado ya declaró “A ver quien amarra el tigre en Durango”.
Viendo como está de caliente el asunto en Durango, y en otros estados donde hay inconformidades, esperamos que el Candidato de Morena entre en razón, se ponga a trabajar, a llamar a la unidad pues no la tiene fácil, y aunque pocos se atrevan a comentarlo, la versión de que Américo puede perder la candidatura por sus errores se está extendiendo y está muy cerca de que pase, además los castillos en el aire que tratan de vender sus defensores, pronto dejarán de ser suficientes si desean obtener la victoria.
Si quieren un poco más de contexto, les dejó el link con la nota completa de la entrevista con el senador: https://sentido-comun.com.mx/2021/11/08/mi-encuentro-con-el-senador-americo-villarreal/
Y para corroborarlo el video en vivo del evento y la entrevista:
https://fb.watch/a9ZHRrEmV0/
