La Comuna
Urgen candidatos de cara limpia
José Ángel Solorio Martínez
¿Qué tanto cambió el escenario al interior de MORENA luego del impacto de los Hermanos Carmona Angulo?
Mucho.
Se puede decir que ni todas las campañas negras juntas, -hasta antes del asunto del financiamiento oscuro- habían trastocado la correlación de fuerzas entre los aspirantes lopezobradoristas para la gubernatura del estado.
Giró tanto y tan radicalmente la situación interna y externa del partido guinda, que de cuatro precandidatos -y candidatas- que inicialmente habían sido seleccionados, pasarán a ocho.
Uno del sur, y otro del norte, enriquecerán la baraja morenista. Obvio: con sus respectivas parejas para cumplir con la obligada -aunque no siempre sensata- equidad de género.
Es muy probable, que también haya cambiado la ponderación de las fortalezas y debilidades de los precandidatos. Inicialmente, se entiende de todo partido, indagaba MORENA por un personaje que tuviera amplia penetración en la sociedad. De otra forma: se requería al más popular, al más conocido, al más carismático.
Hoy parece que las circunstancias han cambiado de forma abrupta.
El indicador de ser conocido no es lo que define en el paisaje actual.
Aparte: el más conocido, se enfrenta a una contradicción de su propia popularidad: tiene un techo muy chico para crecer. Es decir: quien llega a una campaña, con una gran popularidad, es muy complicado que rompa esos niveles de aceptación en forma amplia e impresionante.
Lo que no ocurre con aquel candidato que llega con bajos niveles de aceptación pero con potencialidades grandes de crecimiento.
Eso parece ser lo que se visualiza en MORENA.
La diogenesca búsqueda del mejor candidato para enfrentarlo a los azules, tendría que ser un ciudadano que no sólo sea conocido por ciertos segmentos sociales, sino que sea un actor que carezca de elementos negativos en su perfil que le de la oportunidad de crecer exponencialmente.
Más claro: ser popular con muchos negativos, es lo mismo que ser impopular; y ser medianamente popular con estados negativos, es lo mismo que ser popular.
Los elementos que cruzarán los factores decisivos del modernismo -a nivel nacional y local- tendrán que poner en la balanza esas variables.
El explosivo, tenebroso y viscoso escenario regional, tiene que ser abordado por el mas preciso análisis del cruce de todas las variables que incidirán en el resultado del primer domingo de junio del 2022.
Apremia, -es un clamor ciudadano- el regreso a los candidatos de cara limpia y de manos transparentes.