Es tiempo de darle las gracias a Maki Por Oscar Díaz Salazar
A la distancia, a posteriori, los panistas allegados a don Francisco N opinan que su jefe cometió el error de no sacudirse a tiempo a Maki Ortiz, que dejó pasar la oportunidad de jubilarla políticamente, ubicando la ocasión al concluir el primer periodo en el que fue presidenta municipal de Reynosa.
En los cinco años que lleva de gobernador don Francisco N, no ha logrado hacerse del control político de su municipio, de Reynosa, porque ese privilegio lo ha tenido su rival más íntima, Maki Ortiz.
Cuando la rémora que lo ha acompañado por su larga travesía en las aguas de la política tamaulipeca se fue con los morenos, el líder de la Vaca Salvatrucha comentó con alivio: en el PAN teníamos un problema, refiriéndose a Maki, pero ahora es problema de los morenos.
Comento lo anterior porque consideró que hoy es buen momento para dar por finiquitado el paso de Maki Ortiz por morena y por la cuarta transformación. Los que toman las desiciones en morena no deberían desaprovechar la oportunidad de darle las gracias a la madre del Niño por su ayuda para mengüar las fuerzas del gobernador insurrecto e incómodo para el lopezobradorismo.
Prolongar la permanencia de la ex presidenta de Reynosa en el morenismo, es alentar las peores prácticas de la política, premiar la deslealtad y dar carta de naturalización a la guerra subterránea como la que hoy impulsa para exhibir a los empresarios que dan soporte económico al movimiento, en un afán de descalificar a los aspirantes al cargo de gobernador, por hacer lo mismo que ella hizo y que hoy se niega a aceptar y a corresponder.
Debo reconocer que la makiavelica hace honor a este apodo, – tiene otros-, y que tiene muy afinado el sentido del timming, pues aprovechó los meses anteriores para fotografiarse y ser recibida por varios actores políticos de Morena que le abrieron las puertas de sus Despachos, le organizaron eventos, le compartieron el foro y la difusión en medios de comunicación y ahora, en vísperas de hacer un primer corte a la lista de aspirantes a ser candidatos de morena al gobierno del Estado, hoy son objeto de sus críticas y sus dardos envenenados que arroja desde el cobarde anonimato, a través de testaferros y páginas de internet a su servicio.
Por eso reitero: el momento de sacudirse la nefasta presencia de Maki Ortiz es hoy. Mañana puede ser muy tarde y/o muy costoso.