*La ex alcaldesa acude al Congreso para recibir «perdón y olvido»
Por: René Martínez Bravo
Apenas hace dos meses, una legisladora de Morena, Edna Rivera, pero de la anterior legislatura, acusó ante la Fiscalía Anti Corrupción a la ex alcaldesa Maki Ortiz, exigiendo la comprobación del gasto o destino de 176 millones de pesos ejercidos en su administración, y que hasta la fecha no lo ha hecho.
El cinismo y desvergüenza es grande en doña Maki, y la simulación también, sin aclarar ni explicar ante la fiscalía sobre dichos señalamientos, se le permite disfrutar de un turístico recorrido en el Congreso, y tomándose fotos y «selfies» con los diputados morenistas, presume su evidente impunidad, y hasta con el líder de la cámara Armando Zertuche Zuani se exhibe.
¿Como es posible que esta mujer se burle así del pueblo tamaulipeco?…
Entonces, ¿porque la sorpresa de que políticos ajenos al régimen hagan gocen de similar impunidad?…. Recuerden que, la corrupción seguirá avanzando mientras que la impunidad esté vigente. No mentir, no robar y no traicionar dice el Presidente Andrés Manuel.
Sería muy saludable para todos, que la Fiscalía Anti Corrupción diera cuenta sobre el estado que guarda la denuncia de la ex diputada Edna Rivera, o si está en la «congeladora», expliquen por qué. Ese silencio se puede huele a complicidad o convencimiento que llama al «sospechosismo».
Por ese tipo de acciones, se ha criticado a la 4T, cuando se «cobija» a quien fue señalado como corrupto, y al ser aceptado en sus filas, «se purifica» y se le perdona todo tipo de corrupción.
