Se espera que lleguen más de 30 mil dosis y se dará prioridad a niños, adultos mayores, personal de salud y embarazadas
Esta patología, de ser el quinto lugar el año pasado, hoy está en la cuarta posición; es un padecimiento respiratorio que vulnera principalmente a niños, adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con males crónico-degenerativos o con sistema inmunodeprimido.
Si bien los problemas respiratorios han disminuido considerablemente durante la pandemia, están presentes en todo el año, debido a los cambios bruscos de temperatura a los cuales la población se expone, de ahí la importancia de aplicar los biológicos contra la influenza y neumocócico, este último a mayores de 60 cada 5 años.
“Octubre, además de ser el mes de la Prevención del Cáncer de Mama, de la No Violencia hacia la Mujer y las Niñas, también es el mes de la vacunación de la influenza”, dijo Gregorio Jesús Ortegón Martínez, médico de la Unidad “Américo Villarreal”.
Aunque la vacuna para Nuevo Laredo se espera para el mes de octubre, la Secretaría de Salud (Ssa) federal anunció que el próximo 3 de noviembre inicia la campaña de vacunación contra la influenza 2021-2022, con la aplicación de 32 millones 328 mil 200 dosis para la población en el territorio nacional, de los cuales 15 millones corresponden a la Ssa.
En este caso, para Nuevo Laredo se esperan más de 30 mil dosis de influenza, que serán aplicadas a igual número de personas, arrancando la campaña con la aplicación de esta vacuna al personal de Salud, seguido del llamado a los adultos mayores. “En estos últimos dos años hemos rebasado las metas, la gente acude más a protegerse, y ya nos preguntan más por ella”, dijo el galeno.
Explicó que estos biológicos son distribuidos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) y la Ssa, por lo que ya fueron capacitados para su manejo y aplicación con insumos.
Además, todas las instituciones de salud cuentan con el personal necesario para atender de manera inmediata a la población objetivo: niñas y niños de seis a 59 meses, personas adultas mayores, mujeres embarazadas, personal de salud y quienes viven con factores de riesgo de sufrir complicaciones en caso de contagio.
“Se dará prioridad a grupos de población en riesgo y personal de salud”, finalizó Ortegón.
