Por: Pedro Chapa Salinas
Esta semana que hoy termina tuvimos la oportunidad de conocer de primera mano los logros que hemos alcanzado como país en estos primeros tres años de gobierno de la Cuarta Transformación encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Y aunque esta primera mitad ha sido una de las más complicadas en cuanto a desafíos y resistencias se refiere, de una cosa podemos estar seguros, somos muchos más los mexicanos que seguimos confiando en el Ejecutivo Federal y que no dudamos en lo más mínimo que el cambio de rumbo que ha trazado el pueblo de México con su mandato en las urnas, tanto en el 2018 como en el presente año, es el del camino correcto.
Y aunque quedan muchos pendientes aun por concluir, todas y cada una de las promesas de campaña del entonces candidato del verdadero cambio, si no se han cumplido por completo, han sido, todas, eso sí, atendidas y promovidas como políticas publicas en los hechos, traduciendo en bienestar su aplicación en una gran parte de la población que había sido no sólo olvidada por más de 40 años, sino traicionada por el régimen corrupto neoliberal de los cinco sexenios anteriores.
Dentro de lo más sobresaliente logrado en esta primera mitad está la reversión a la privatización de los bienes de la nación, el empoderamiento del pueblo en los asuntos públicos y el combate frontal a la corrupción.
Este es el fondo del asunto que más importa para la población. Es en suma el despertar de la mayoría de los ciudadanos en lo que le corresponde como principio básico de la cosa pública y del poder del pueblo en tomar las riendas de su gobierno, emanado de si, para el beneficio de sí. No sólo es el triunfo del débil sobre el opresor fortalecido por la impunidad ofrecida desde un gobierno también opresor, pero sobre todo corrupto, sino es el refrendo del visto bueno de la mayoría de la población en seguir por el buen camino que con mucho esfuerzo y sacrificio seguimos pavimentando, para seguir adelante dignificando la vida pública, y lograr consolidar la Cuarta Transformación.
Y para que esto sea posible, aunado a la primera revolución pacifica que hemos apenas comenzado desde abajo, concientizando al pueblo de que el poder puede ser soberano y debe emanar de la decisión de la mayoría de elegir libremente a sus gobernantes, es imprescindible ahora que la justicia sea impartida dando prioridad a la patria y no a los potentados, como se venía haciendo ya por décadas. Este uno de los pendientes por el que no podemos dejar de luchar nunca, hasta no conseguirlo.
Y para los incrédulos, los traidores, los tecnócratas neoliberales, hasta para los odiadores de la 4T y uno que otro trasnochado, les tenemos excelentes noticias: 1. El estado que guarda la nación es, a pesar de la pandemia que ha devastado al mundo entero, y del saldo que los anteriores nos han heredado, sumamente positivo; 2. Aunque les parezca inmerecido, sigue siendo un logro para el pueblo mismo, por las condiciones económicas mundiales, y repito, por como los hoy opositores han maltratado a la nación, el histórico aumento de las remesas que llegan al país; 3. Nuestra moneda no sólo no se ha devaluado, sino que a pesar que el dólar americano no sigue siendo tan fuerte como antes, nuestro Peso se ha mantenido como nunca antes; 4. A pesar de las apuestas en contra, la inversión nacional y extranjera directa ha aumentado considerablemente, llegando también a máximos históricos; 5. No hemos adquirido deuda, ni soberana, ni extranjera, cuando todos argumentaban sería el suicidio para la economía, sobre todo en estos momentos, el no hacerlo; 6.Los precios de los energéticos no sólo no han aumentado sino por el contrario, han disminuido en favor de los más necesitados; 7. Se ha quintuplicado el salario mínimo y para asombro de la mayoría, se ha mantenido la inflación de un digito a pesar de que el precio del dinero a través del tiempo ha disminuido; 8. La recaudación, aunque falta mucho por hacer, ha incrementado, sobre todo en aquellas empresas a las que se les condonaban miles de millones de pesos anuales; 9. El costo de la administración pública federal ha decrecido considerablemente; 10. Las reservas del Banco de México han alcanzado un máximo histórico y el Índice de la Bolsa Mexicana de Valores, también.
Por último, pero no menos importante, sino todo lo contrario, los adultos mayores, los estudiantes desde Primaria hasta preparatoria y ahora Universidad, las madres solteras y las personas con capacidades diferentes, todos sin excepción, son por primera vez en sus vidas, tomados en cuenta y apoyados de manera económica directamente desde el gobierno federal.
ADENDUM
Esta es la mejor prueba de que no sólo es posible tener finanzas sin darle la espalda a la ciudadanía, sino que es de suma importancia, si queremos tener país y un pueblo feliz en el presente y para el futuro, poner atención a los mas necesitados, dando prioridad, por el bien de todos, primero a los pobres.
También, durante estos primeros tres años de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, fue posible lograr comprender porqué es indispensable combatir la corrupción desde su raíz, no sólo para regresarle la dignidad que merece nuestra cultura y nuestros pueblos, sino para dejar en claro quiénes son aquí los enemigos de México y los que tenían metido al país en esta espiral decadente cuya narrativa degradaba la vida pública, al mismo tiempo en que ensanchaba la brecha de la desigualdad.
Queda mucho por hacer. Esto es solo el principio. Lo bueno es que se ha logrado salvar al país. ¡Lo mejor, la esperanza se ha hecho realidad!
