Agrupaciones de pescadores y ejidatarios que dependen del sistema lagunario Champayán, Chairel y río Tamesí, así como representantes de la sociedad civil se reunieron la tarde de este jueves en las oficinas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), ubicadas en Altamira.
Lo anterior con la finalidad de conocer los avances en torno a la solicitud planteada al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador en el 2018, sobre la urgencia de encontrar una solución definitiva en torno al problema del almacenamiento y garantizar el abasto de agua a la población del sur de Tamaulipas.
Andrés Bonilla Ibarra, representante civil del sur de Tamaulipas, apoyado por Rafael Torres Guillén, además de ejidatarios y pescadores del municipio de Altamira, fueron llamados para reunirse la tarde de este jueves 1 de julio en las oficinas del organismo que controla los cuerpos de agua en el país.
“Desde el año 2018 al gobierno federal por medio de la Conagua se le pidió que tome cartas en el asunto, solo se le está dando largas a una problemática que debe ser considerada como un asunto de seguridad nacional que consiste en garantizar el abasto de agua a más de un millón de habitantes de la zona sur de Tamaulipas, el sector industrial y comercial”, agregó Bonilla Ibarra.
Además, el exfuncionario de la Semarnat agregó que “la presidencia de la República Mexicana debe atender la problemática de agua en el sistema lagunario Champayán, Chairel y río Guayalejo y por ende la escasez de agua ante la ciudadanía.
Añadió que hoy en día el nivel de agua está en recuperación, aún no está en los niveles adecuados y no se tiene una seguridad hibrida para la comunidad en general en los próximos 12 meses, “estamos pendientes con saber en qué estado se encuentra la gestión que iniciamos desde el año 2018 y estamos involucrados los ciudadanos de la zona sur de Tamaulipas y norte de Veracruz”.
El entrevistado además informó que la Federación, así como el Estado y el Municipio deben enfocar su atención en recursos económicos en garantizar el abasto de agua en los próximos 80 años.
“La condición actual es que las compuertas están abiertas, no están cerradas; está en proceso de reparación dicho sistema hidráulico, el agua dulce está llegando, pero se está vaciando el sistema lagunario y eso nos preocupa a todos”, comentó.
