Sentido Común
Victoria; Cayendo la Cabeza, cae el cuerpo
Por: Mauricio Fernández Díaz
Todas las victorias obtenidas por los candidatos de MORENA a las alcaldías y Diputaciones tanto locales como Federales son relevantes, dignas de encomio.
Sin embargo, la conquista de la capital de cualquier estado por la oposición tiene un significado profundo, emblemático.
Esto, por varias razones.
1.-Es la sede de los poderes del Gobierno del Estado, que están bajo el mando del Gobernador y alimentan la monstruosa maquinaria burocrática utilizada en tiempos de campaña para lograr triunfos.
2.- Es, ha sido y será obligado para cualquier partido gobernante mantener bajo su control la capital del Estado como una muestra de poderío político, fortaleza y unidad.
3.- La capital de Tamaulipas, Ciudad Victoria, jamás ha sido gobernada realmente por el presidente en turno sino por el Gobernante en turno; Dicho de otra manera, el alcalde es algo simbólico que de manera alguna puede resaltar o hacer imagen. Su perfil siempre ha sido de bajo a nulo.
4,- Los candidatos de oposición en campaña históricamente han terminado sometidos por el Gobierno del Estado ya sea mediante amenazas, intimidaciones, dinero o simplemente fraude.
5.- Perder la capital a manos de un opositor, si no es mediante una negociación, significa un durísimo golpe al Gobernante, en este caso a Cabeza de Vaca. Eduardo Gattas no se enfrentó a Ma del Pilar Gómez sino al Gobierno del Estado, a su estructura clientelar, su dinero, sus mapaches, sus miles burócratas comandados por Elva Valle, al magisterio, así como a los trabajadores de la Secretaría de Salud, del Ayuntamiento y los derrotó con su trabajo de unificar y catalizar el hartazgo de todos, desde el empresario afectado profundamente por la falta de liquidez y de pagos hasta el más modesto obrero, pasando por los dirigentes espurios de los sindicatos, entre ellos el de las maquiladoras.
6.- El Gobierno y Ayuntamiento, así como otras instituciones controladas por el Gobernador como COMAPA, ITAVU, Congreso del Estado y otras mantienen en sus nóminas o brindan apoyos “Cahoyotes” se les llama en la jerga periodística a verdaderos sicarios de la pluma, comprometidos no con el periodismo real sino con el poder.
Eduardo Gattas hizo la hombrada de aguantar a pie firme los furibundos ataques de una prensa que ha devenido en francotiradores a sueldo de quien les pague. No hacen periodismo; Dañan a tan noble profesión.
No es ilícito realizar convenios para difundir las actividades de un ente gubernamental o institucional; lo reprobable es acatar las órdenes de atacar, difamar, ensuciar y desprestigiar mediante toda clase de calumnias y falsedades a quien Gobierno del Estado considera su enemigo, en este caso Lalo Gattas.
Esto le da un plus a la victoria en Victoria de MORENA. Le brinda un punto de apoyo invaluable al candidato ganador, al igual que lo enfrenta a un compromiso brutal: Cumplir las altísimas expectativas que el pueblo victorense depositó en el al llevarlo a la presidencia.
Lalo Gattas debe, sin duda, realizar muchísimas modificaciones en la actual estructura municipal donde cientos de personas cobran como aviadores y varios sicarios de la pluma ganan por difamar, no por informar.
Lalo Gattas ya pasó a la historia como el primer presidente de MORENA en ganar la capital del Estado; Ahora viene lo mas difícil. Honrar con un trabajo dirigido a los desprotegidos, a los pobres, a los que siempre fueron relegados en sus colonias llenas de hoyos, sin agua, sin servicios públicos a la vez que dinamiza la economía haciendo proveedores a empresarios y gentes de Ciudad Victoria que fueron desplazados por Cabeza de Vaca para poder realizar su propio negocio: El diezmo, que se convirtió en el 40% de las ganancias por obra o bien entregado sin licitación de por medio.
Claro que la ciudadanía debe ayudar, apoyar, no dejarlo solo. Ya está ahí, ya ganaron, pero Lalo Gattas va a necesitar de todos nosotros para poder sacar del atraso ancestral a la capital de Tamaulipas.
¿Queremos una ciudad de primer mundo? Vamos por ella, todos juntos, empujando, ayudando y si es necesario, exigiendo
