CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Mario Cárdenas Guillen, quien asumió el liderazgo del Cártel del Golfo (CDG) –el cual fue fundado y dirigido por sus hermanos Ezequiel y Osiel–, fue sentenciado a 20 años de prisión por el delito de delincuencia organizada con funciones de administración, supervisión o dirección.
En un comunicado, la Fiscalía General de la República (FGR) señaló que el sentenciado, quien también es conocido como Rubén Vela Garza alias “El M1” o “El Gordo”.
De acuerdo a la investigación, Mario Cárdenas fungió como uno de los principales líderes de una organización criminal, responsable del trasiego de drogas, la cual opera en diversos estados de la República, así como al trasiego de estupefacientes a Estados Unidos.
En junio de 2019, un Juez Federal le dictó sentencia condenatoria, sin embargo, la defensa apeló la resolución, por lo que la autoridad judicial ordenó la reposición del procedimiento.
Por lo anterior, el Ministerio Público Federal (MPF) presentó las pruebas suficientes, por lo que el juez dictó la sentencia condenatoria de 20 años de prisión en contra.
Así, la Fiscalía obtuvo sentencia condenatoria en su contra por el delito de delincuencia organizada (en la hipótesis de cometer delitos contra la salud), con funciones de administración, supervisión o dirección.
Mario o Rubén fue capturado por las Fuerzas Especiales de la Secretaría de Marina en septiembre de 2012, cuando entraba a un inmueble ubicado en Altamira, Tamaulipas.
Le fueron decomisados un arma larga, tres cargadores, 30 cartuchos, dos granadas, 129 mil pesos y cuatro sobres de cocaína.
Antes, de 1995 a 2007, estuvo preso en los penales de máxima seguridad de Matamoros (Tamaulipas) y Puente Grande (Jalisco), por los delitos de delincuencia organizada y contra la salud.
Desde el interior del penal de Matamoros, coordinaba el tráfico de grandes cargamentos de cocaína y mariguana, por lo que fue necesario en 2003 enviarlo al penal de Puente Grande, de donde salió en libertad cuatro años después.
Mario asumió el liderazgo del Cártel del Golfo en 2010, luego de que, el 5 de noviembre de 2010, su hermano, Ezequiel Cárdenas, apodado “Tony Tormenta”, fue abatido por las Fuerzas Especiales de la Marina.
Mario también es requerido por la corte Federal del Distrito de Texas por su presunta responsabilidad en delitos contra la salud y asociación delictuosa.
